Casa Tarradellas modera su ritmo de crecimiento y factura 1.072 millones
Casa Tarradellas, la empresa que lidera el mercado de la pizza fresca en España, moderó su ritmo de crecimiento el pasado año, aunque se consolidó su negocio por encima de los mil millones de euros.
La compañía catalana registró una facturación individual de 1.072 millones de euros, un 1% más que en el ejercicio anterior. En el año del estallido del Covid, la empresa familiar había crecido un 8%, lo que le permitió superar por vez primera en su historia la cota de los 1.000 millones.
Estas cifras no reflejan la actividad de Herta Foods, la sociedad creada en 2020 con Nestlé para hacerse con los negocios cárnicos y de masas culinarias del gigante suizo de la alimentación en Francia, Alemania, Bélgica y Reino Unido e Irlanda agrupados bajo la marca Herta. Casa Tarradellas tiene el 60% de la compañía y Nestlé, el 40%. La empresa conjunta alcanzó en 2021 unas ventas consolidadas de 758 millones de euros, casi un 4% menos. Fuentes de Tarradellas recalcaron ayer que Herta se gestiona como una empresa independiente.
La empresa de Gurb (Barcelona), que también fabrica embutidos, loncheados y patés y es un destacado proveedor de Mercadona, no desveló el beneficio del pasado año. En los dos ejercicios precedentes, el resultado neto fue del 2,5% de las ventas. Con el mismo nivel de rentabilidad, Casa Tarradellas habría ganado cerca de 27 millones de euros en 2021.
El principal hito comercial de la compañía fue el pasado año el lanzamiento de sus dos primeras variedades de pizzas frescas con masa de fermentación lenta. Este proyecto, junto con la puesta en marcha de un nuevo parque fotovoltaico, absorbieron buena parte de las inversiones ejecutadas en 2021.
Tras el fuerte avance de 2020, el líder de la pizza fresca aumentó sus ventas el pasado año un 1%