Los bancos de la opa ‘hacen un Twitter’
En los cinco meses transcurridos desde que Siemens anunciara su oferta pública de adquisición (opa) sobre Gamesa hasta su aprobación ayer por la CNMV, se ha producido un cambio significativo del entorno en los mercados de renta variable y deuda, lo que va a forzar una variación sustancial de la estructura financiera a corto plazo de la compra.
Inicialmente, el grupo alemán iba a avalar y pagar la opa con un préstamo puente de 4.200 millones de euros, firmado el pasado 22 de mayo con Bank of America y JPMorgan. El 23 de junio, este importe se redujo a 2.900 millones además de sindicarse con otras 18 entidades; y el pasado 7 de octubre se disminuyó a 1.940 millones. Tiene plazo de vencimiento a un año.
Junto a los dos bancos citados –que ponen cada uno 169,2 millones de euros–, los otros prestamistas que participan en el crédito sindicado –cada uno con 88,9 millones– son Bank of China, BBVA, Santander, BNP Paribas, CaixaBank, Citi, Commerzbank, Crédit Agricole, Credit Suisse, Deutsche Bank, HSBC, Landesbank Hessen, Mizuho, SEB, SMBC, Société Générale, Standard Chartered y UniCredit.
Para compensar el descenso en la financiación externa, Siemens Energy aporta 1.148 millones de sus fondos propios por un lado, y además utiliza otros 960 millones captados en una emisión de bonos convertibles en septiembre, a un tipo de interés del 5,625%.
Como resultado de la nueva estructura, también cambia el origen de las garantías depositadas ante la CNMV mientras se desarrolla la opa. Los bancos han emitido 20 avales por un total 1.940 millones, y otros 2.108 millones corresponden a un depósito aparcado por Siemens Energy en una cuenta en Banco Santander.
La idea de Siemens Energy era refinanciar el crédito puente de 4.200 millones en el año posterior a la liquidación de la opa con un mix de capital, bonos y deuda a mayor plazo. Al forzar el anticipo de esta maniobra, las entidades quieren protegerse de un modo similar a lo sucedido en Twitter, donde los bancos que proporcionan la deuda redujeron de 25.000 a 13.000 millones de dólares su compromiso durante la tramitación de la oferta de Elon Musk, anunciada en abril pero cerrada al final de octubre.
Es decir, las opas sobre Gamesa y Twitter han sufrido en sus respectivas tramitaciones el agresivo proceso de subidas de tipos de interés y las caídas de las valoraciones, que reducen el apetito de riesgo de los bancos. Por ello, éstos han querido reducir su exposición sin esperar al cierre de las operaciones, por miedo a quedarse con la deuda sin poder repartirla entre más bancos y bonistas.
En el caso de Twitter, se estima que Musk ha pagado un sobreprecio del 80% por la red social, ante el colapso de las empresas tecnológicas en Bolsa desde que anunció la oferta. En Gamesa, su cotización ha subido un 40% desde el lanzamiento de la opa de Siemens, mientras su rival Vestas cotiza en niveles similares.
PwC, en su informe de valoración de la opa sobre el fabricante español de aerogeneradores, argumenta que la comparación con otras empresas del sector no es adecuada al existir pocas firmas similares.
Morgan Stanley, banco que lidera la financiación de Twitter, no participa en la de Siemens Gamesa, aunque sí coinciden otras entidades en ambos sindicatos: Bank of America, Mizuho, Société y BNP.
Siemens Energy indica que tiene la intención de “refinanciar íntegramente el préstamo puente tan pronto como sea posible, atendiendo a las condiciones de los mercados, con una ampliación de capital”.
Como en la oferta de Elon Musk, las entidades reducen el volumen del préstamo a Siemens