Las cementeras alertan de un parón inversor en la construcción por el alza de los costes
La venta de cemento, el mejor termómetro para medir la salud del sector constructor en España, empeora. Así lo reflejan los datos aportados ayer por la patronal Oficemen, que representa los intereses de los grupos cementeros en España. En su opinión, el parón del sector se está agravando y piden al Gobierno que se apoye en la iniciativa privada para corregir los desequilibrios en el mercado de obra pública y edificación, con cada vez más proyectos sin ejecutar.
El parón es fruto del alza de costes de los materiales, incluido, el del cemento. “Los costes eléctricos de nuestro sector se han incrementado un 400% en los últimos dos años, una situación que se agrava cada día por la crisis energética que sufrimos”, explica el director general de Oficemen, Aniceto Zaragoza.
El consumo de cemento sufrió caídas durante julio y agosto de un 8,6% y un 5,3%, respectivamente, lo que ha reducido el crecimiento en el acumulado anual de los ocho primeros meses del año al 0,2%. El consumo suma cuatro meses en retroceso y pierde 2,3 puntos porcentuales en acumulado anual, frente a los datos previos al verano.
Entre julio y agosto se consumieron 2,37 millones de toneladas de cemento, lo que supone 180.486 toneladas menos que en el mismo período del pasado año. El acumulado anual refleja un consumo de 9,87 millones de toneladas, con un diferencial de tan solo 18.996 toneladas frente al alcanzado en los ocho primeros meses de 2021.
“Los últimos datos de la estadística del cemento continúan apuntando a una desaceleración del sector constructor, que lleva fraguándose ya un cuatrimestre, y que viene avalada también por los análisis de otras instituciones como Eurostat, cuyos últimos datos, del mes de junio, reflejan una caída en la producción del sector de la construcción del 10,4%”, asegura en Oficemen
En su opinión, la colaboración público-privada es la manera de paliar el lastre de los elevados volúmenes de obra sin ejecutar.
La venta de cemento sufrió caídas en julio y agosto del 8,6% y del 5,3%, respectivamente