LAS DIEZ MAYORES RONDAS DE 2022
El frenazo global de la inversión ha llegado también al ecosistema emprendedor español. Pese a registrar un comienzo de año muy sólido, con algunas megarrondas y la aparición de nuevos unicornios –firmas que logran una valoración superior a los 1.000 millones de dólares–, la situación del mercado se ha deteriorado en los últimos meses hasta el punto de que conseguir dinero hoy se ha convertido en una misión mucho más difícil que hace un año.
El dinero desembolsado por los fondos de capital riesgo ha caído un 20% en el tercer trimestre del año, en comparación con el mismo periodo de 2021, según los datos del Observatorio de Startups de la Fundación Bankinter.
En concreto, entre julio y septiembre se registraron 84 operaciones por un importe de 738 millones de euros, frente a las 113 transacciones y 929 millones del ejercicio previo. Se trata del segundo trimestre consecutivo en el que el volumen de inversión se retrae en términos interanuales.
Quienes han salido al mercado en busca de fondos rereconocen que los inversores se han vuelto mucho más exigentes y cautos a la hora de invertir, con negociaciones más largas y duras y valoraciones a la baja.
“El inversor tiene miedo, está esperando, no quiere poner precio… Nadie quiere hacer grandes rondas cuando todavía están cayendo las valoraciones”, asegura por teléfono desde México Jordi Romero, fundador y consejero delegado de Factorial.
La start up catalana de RRHH anunció en octubre una ronda de 123 millones de euros, liderada por fondos internacionales como Atomico y Tiger Global Management, con la que alcanzó el estatus de unicornio.
La de Factorial es una de las principales operaciones que han tenido lugar en España en 2022 y su negociación ha tenido lugar en un contexto muy poco favorable, cuando la guerra de Ucrania y la inflación ya habían acabado con la barra libre de liquidez de los últimos años. “Veníamos de años, 2020 y 2021, en los que el capital era extremadamente accesible, y ahora esta
Importe, en millones de euros. mos en un momento de mucha sequía”, apunta Romero.
Laura Urquizu, consejera delegada de la start up Red Points, que esta semana ha comunicado una nueva recaudación de fondos , reconoce que “los inversores han sido más conservadores comparado con rondas anteriores y han incidido más en las métricas”. La empresa, que comercializa una solución para luchar contra las falsificaciones en Internet, ha dado entrada al venture capital europeo IRIS en una ampliación de capital de 20 millones de euros.
La emprendedora destaca el cambio de expectativas de los fondos, que han pivotado en sus prioridades y están primando la rentabilidad por encima del crecimiento. “Hasta hace no tanto lo más relevante para los inversores en las fases en las que se mueve Red Points era el puro crecimiento, ahora ha mutado hacia crecimiento sostenible, es decir, crecimiento con rentabilidad”, asegura.
Una opinión que comparte Antonio Corral, fundador de la start up de reclutamiento HR Bot Factory. “Hace unos años los venture capital se fijaban más en la capacidad de crecer y escalar y no importaba si tenían deudas o quemaban mucho dinero. Esto ha cambiado y ahora ponen mucha atención en las finanzas y la rentabilidad”.
Esta cautela a la hora de poner dinero está siendo más intensa en las fases más avanzadas, las que requieren de inversiones de decenas o incluso centenares de millones. Es en estas operaciones donde más dudas está habiendo entre las gestoras.
“Es un entorno en el que algunos inversores deciden no invertir en un activo y esperan por si las valoraciones siguen cayendo. Pero claramente eso conlleva un riesgo, porque pueden perder la oportunidad de invertir en empresas fantásticas”, destaca Urquizu.
Buen comienzo de año
Después de un 2021 en el que las start up españolas recaucientemente