La banca acelera en depósitos
Aunque los grandes bancos españoles se resisten a entrar en la renovada pugna por los depósitos, las entidades más pequeñas, nacionales y extranjeras, siguen elevando la rentabilidad de los depósitos a plazo en pleno verano. Hasta siete bancos dan ya más del 1% a un año, y la oferta crece también en el menos concurrido escaparate comercial a corto. Un buena noticia para miles de hogares españoles, que atesoran cerca de un billón en depósitos, en muchos casos sin remuneración alguna. En plena subida de tipos en Europa, que según las expectativas acabarán 2022 en alrededor del 1,5%, es previsible que los rendimientos de los depósitos sigan al alza en los próximos meses y que se sumen más bancos a la guerra comercial. Por el camino, los ahorradores deben hilar muy fino para acertar con la elección de estos productos. La lógica indica que lo más inmediato sería contratar plazos cortos, no superiores a 12 meses. El objetivo: disponer de liquidez en plazos de tiempo no demasiado largos para aprovechar las nuevas oportunidades que surjan en un mercado que promete dinamizarse. Aunque el giro al alza en los tipos de los depósitos empezó en primavera, la oferta de la banca está muy lejos de la velocidad de crucero. Tras una larga travesía del desierto, hay una buena oportunidad para que quienes atesoran liquidez aprovechen, al menos mientras se aclara la dirección de la economía, para acceder a activos con más rendimiento, pero también más riesgo. Como siempre, combinar bien la rentabilidad/riesgo debe ser el lema.