Destinos para exprimir el verano
VIAJES Del interior de Aragón a la apetecible Oporto, pasando por el paraíso de Maldivas o el Londres más cosmopolita.
No es tarde para planificar sus vacaciones. Si todavía no ha disfrutado de ellas, enhorabuena, porque se encuentra entre esa élite que puede veranear cuando la plebe asalariada vuelve a galeras. Según un estudio de Kayak, las búsquedas para viajar en septiembre se han incrementado en un 40% en comparación con las cifras de 2019. ¿Pero dónde ir? Desde la España interior en busca de naturaleza hasta ciudades cosmopolitas (y algo más frescas) como Oporto y Londres pasando por la cada vez más accesible Maldivas.
En Aragón, pero en la encrucijada con Cataluña y Comunidad Valenciana, se asienta esta región de verdes valles, rutas de senderismo que vertebran ríos y gastronomía de altura donde tuvo lugar la Batalla de Tévar, protagonizada por Rodrigo Díaz de Vivar, El Cid Campeador, en el siglo XI. La Toscana española huele a pinares, romero y almendros y sabe a algunos de los mejores restaurantes de Aragón como Baudilio, en Valderrobres –elegido como uno de los pueblos más bonitos de España– donde Fabiana Arévalo lidera un comedor más gastronómico en la planta superior y un espacio de tapas a pie de calle. Otra dirección, por el patrimonio de sus calles medievales y su poderío culinario, es La fábrica de Solfa, en el pueblo de Beceite, una antigua fábrica de papel donde se preparan platos creativos con productos de temporada. Tras la comida, una ruta ligera de senderismo por el Parrizal de Beceite donde las aguas claras del río evocan a unas
Baleares de interior. En la zona también puede hacer el salto de tirolina más largo de Europa o disfrutar de los vinos de la comarca.
Para dormir, Torre del Marqués, miembro de Small Luxury Hotels of the World, que se mimetiza con el entorno en una casona rehabilitada donde todos los materiales empleados son naturales y de proximidad; como los muros de piedra seca de la finca, un material declarado patrimonio de la humanidad por la Unesco. Con solo 18 habitaciones, la
ESTILO VICTORIANO EN KENSINGTON Si se quiere estar a la última, Londres debe visitarse cada estación del año. Este verano puede decantarse por el barrio de Kensington. ¿Las razones? Hay nuevas exposiciones temporales en el vecino V&A Museum; es la cuna de los jardines que toman su nombre y de la Serpentine Gallery, y es el barrio del Meliá London Kensington (a la derecha) que ha abierto tras acometer la rehabilitación de tres casas victorianas. cocina de su restaurante panorámico se nutre de ingredientes locales y su spa tiene la firma de Natura Bissé. También dispone de huerto ecológico, piscina y una lista de experiencias que van desde la cata de vinos y aceite hasta picnics en la finca o cenas de barbacoa que terminan con la observación de estrellas.
Sí, siempre hay algo nuevo que hacer en la capital británica, también en ve
LA TOSCANA ESPAÑOLA
La comarca de Matarraña, en Teruel, se ha ganado este calificativo por su paisaje, sus vinos y el encanto de pequeños hoteles como Torre del Marqués (a la izq,), con 18 habitaciones y un restaurante de kilómetro cero que dará que hablar. Buen punto de partida para descubrir los pueblos de Valderrobres o Beceite y caminar junto al río por el Parrizal (imagen superior).
rano. Como pasear por los jardines de Kensington y acabar en la Serpentine Gallery, que ahora exhibe Back to Earth, con trabajos de artistas que nos recuerdan la fragilidad de nuestro planeta; o muestra la belleza de la arquitectura de las capillas al aire libre. No cambiamos de barrio porque en él se erige el Victoria & Albert Museum con exposiciones en marcha sobre la célebre autora de dibujos infantiles Beatrix Potter o un alegato sobre la historia de la moda masculina en Fashioning Masculinities: The Art of Menswear. En esta zona también hay exhibiciones del buen gusto hotelero como Meliá London Kensington, que forma parte del exclusivo sello Meliá Collection que el grupo creó hace unos meses. ¿Por qué? Por la singularidad de sus tres casas victorianas rehabilitadas, porque se inspira en el escritor, diseñador y artista William Morris (presente hasta en los cócteles) y por su SW7 Brasserie & Bar, una fusión de la cocina británica y mediterránea. Tiene 76 habitaciones de ocho categorías, alguna como guiño a la relación del rey Alfonso XIII e Inglaterra. Por cierto, el minibar está incluido.
La ciudad portuguesa de calles estrechas, azulejos a
cada golpe de vista y casas de colores junto a la ribera siempre apetece. Más cuando hay aperturas recientes, como el hotel Eurostars Aliados, un cinco estrellas en la céntrica avenida del mismo nombre desde donde descubrir a pie la Torre de los Clérigos, la estación de tren de São Bento, la librería Lello, la catedral o el espectacular edificio de la Bolsa de Oporto. La arquitectura, los puentes, el río Duero y el vino tematizan este hotel de 149 habitaciones que también cuenta con restaurante, gimnasio y un spa. Tras amanecer con vistas al Ayuntamiento de la ciudad lo mejor es caminar hasta el puente de don Luis I, construido por Gustave Eiffel antes que su vanagloriada torre parisina, y cruzarlo para arribar al terreno fértil del vino de Oporto: Vila Nova de Gaia. Allí puede visitar alguna de las más célebres, como Taylor’s, y entrenar el paladar en el abanico gastronómico que ofrece el distrito de ocio WOW (World of Wine). Para garantizarse las vistas y una buena selección de marisco y pescado, lo mejor es decantarse por The Golden Catch, pero el viajero tiene otros 11 restaurantes y bares que permiten probar una importante selección de vinos, un buen café portugués, platos vegetarianos o propuestas dulces.
WOW nació como un barrio para atraer al turista hacia la cultura de Oporto, por eso incluye experiencias en sus siete museos ligadas al corcho, la moda y el diseño, el chocolate, el vino (por supuesto), la historia de la ciudad o el universo de los vasos a través de los siglos, literal.
Matarraña
Londres
Oporto
UNA CIUDAD ‘OBRIGADA’ Esta palabra (significa gracias en portugués) la repetirá en alguno de los cafés de la ribera junto al Duero, en los hoteles cinco estrellas del centro como el Eurostars Aliados –en la avenida del mismo nombre y junto al Ayuntamiento (imagen de la izquierda)–, en los museos que salpican el distrito cultural de WOW, en Vila Nova de Gaia, o en alguno de sus 12 restaurantes y bares con vistas a la ciudad.