La dificultad de dar forma a la imaginación de Nacho Cano
Nacho Cano lleva más de diez años imaginando un musical basado en la historia de Malinche, una figura controvertida, que cambió la historia de España y de México –quizá de toda América Latina– y a la que se considera madre del mestizaje gracias a su relación con Hernán Cortés. La obra llegará finalmente a los escenarios el próximo 15 de septiembre y la expectación por su estreno está siendo enorme. Tanto como el reto de convertir en realidad eso que imaginaba el exmiembro de Mecano. El encargado de hacerlo es Hansel Cereza, cofundador de la mítica compañía La Fura Del Baus y líder de varios espectáculos en Las Vegas, como LOVE. “Lo primero que tuve que hacer es entender qué tenía él en la cabeza para intentar darle forma y llevo en ello casi tres años trabajando en exclusividad en este ambicioso proyecto”, asegura uno de los mayores expertos del mundo en vuelos acrobáticos y artes escénicas.
Y es que Cano decidió rodearse de los mejores ante las enormes dificultades que planteaba el proyecto convencido de que si convertía esta historia en un musical, debía hacerlo yendo a por todas. “Lo decidimos de mutuo acuerdo porque es una historia tan importante, tan rica en matices, que no se podía hacer a medias. La mente de Nacho Cano es muy rica, muy compleja, y el trabajo que hemos desarrollado durante estos años es muy elaborado”, explica Cereza, que ha coordinado una puesta en escena que debe estar a la altura de las partituras de Cano y con la que el público sentirá muy de cerca mucha emoción. En Ifema, en un escenario de unos 29 metros de largo, con graderíos y estructuras de suelo, así como con agua y hasta cascadas, “Malinche no es comparable a nada” a nivel de vestuario, maquillaje, iluminación, decorados, coreografías o acrobacias. Y para demostrarlo Cano ha contratado a dos de los talleres más prestigiosos del mundo, Molla y Estudio Arte Herrador, que han diseñado y puesto en marcha una compleja escenografía.
“De los cuarenta años que llevo en este negocio nunca antes había participado en algo así; Malinche es un punto y a parte en mi carrera; ha sido y sigue siendo un reto enorme”, reconoce Cereza, que añade: “No estamos muy acostumbrados a crear espectáculos de este tipo en España, por eso estoy seguro de que producirá un gran impacto en el público español que apreciará el enorme trabajo que hemos hecho y el estudio de la historia tan profundo que ha implicado. Estamos todos muy cansados, pero cada día que pasa nos sentimos más satisfechos”, señala el director artístico, escénico y coreógrafo, que ha supervisado todos los pasos que ha dado durante los últimos tres años el equipo de Malinche, que Cereza define como “brutal”. Entre sus miembros destaca el estilista José Ventura y su equipo, encargado de diseñar el vestuario y que ha colaborado durante años con creadores de la talla de Guy Laliberté, fundador del Circo del Sol; también, Olga Llorente, que a pesar de su juventud ha acumulado un éxito tras otro bailando en diferentes espectáculos.