Pequeñas perlas para diversificar la cartera
La coyuntura energética favorece a Grenergy y Tubacex. EDreams aprovecha el tirón turístico. FCC y Catalana sacan jugo a la gestión.
BOLSA
En tiempos de alta incertidumbre económica, los inversores suelen centrar sus apuestas bursátiles en los grandes valores porque se tiende a asociarlos con negocios más sólidos y diversificados y, por lo tanto, con mayor resistencia a las crisis. Esto no siempre es así y, además, conlleva un castigo para las cotizadas de menor tamaño que a veces parece injustificado.
Pese a que los pequeños y medianos valores no están ahora de moda, los mercados de acciones ofrecen numerosas oportunidades de este perfil que atraviesan por un buen momento en Bolsa y con perspectivas positivas. Éstas son cinco opciones en la Bolsa española.
● Catalana Occidente. Su decisión de centrarse exclusivamente en dos líneas de negocio (el tradicional de seguro y el seguro de crédito), siguiendo un criterio de gestión conservador y prudente, “ha conseguido que sean muy rentables y no tener que depender de la obtención de resultados financieros en base a otras actividades inversoras”, explica Antonio Castelo, analista de iBroker. Su estrategia para ganar cuota de mercado se basa en integrar pequeñas compañías, adquiriendo siempre a buenos precios, con procesos rápidos y eficientes, como el reciente acuerdo para comprar el Grupo Mémora, líder en España y Portugal en servicios funerarios y en la gestión de tanatorios.
Éstas son sus fortalezas. Su debilidad, según Castelo, es el riesgo de que en el mercado se perciba que los seguros de crédito pueden verse perjudicados si la actividad económica global entra en crisis.
El valor, que cae un 0,74% en 2022, cuenta con un potencial alcista del 35,3% hasta el precio objetivo del consenso de firmas de Bloomberg.
● EDreams. La compañía de viajes online es uno de los valores del Ibex Medium con mejor comportamiento en las últimas cinco semanas: su revalorización ronda el 15%. Sacudida por una intensa volatilidad, como el resto de los valores ligados al turismo, desde que estalló la crisis por la pandemia del Covid-19, el entorno empieza a favorecerle. “Poco a poco vemos como los niveles de ocupación en las aerolíneas están cercanas al 80%-85% de los niveles de 2019, mientras que la ocupación hotelera vive uno de sus mejores momentos. Además, la escalada de los precios de los billetes de avión se ha relajado considerablemente. Si continuamos viendo las ganas de viajar con una reducción y la inflación se contiene, la tendencia del valor podría continuar al alza”, sostiene Manuel Pinto, analista de XTB.
Cotiza con un descuento del 77% hasta la valoración del consenso de analistas.
● FCC. En iBroker destacan la perspectiva alcista del grupo, líder en la gestión de residuos en España. “Después de un duro proceso de reestructuración estratégico y financiero, con el objetivo de obtener rentabilidad de forma prioritaria, ha logrado convertirse en un grupo solvente y con gran futuro y proyección”, comenta Castelo.
La fuerza de FCC reside, en su opinión, en la elevada presencia en el negocio de servicios medioambientales y de gestión de aguas, y la buena evolución de otros negocios como construcción e inmobiliario. Además, está empezando a adquirir importante presencia global (está en Centro Europa, Reino Unido, Oriente Medio, Latinoamérica y Norte de África), lo que le facilita una importante diversificación de sus ingresos.
El grupo es generador neto de caja, cotiza con una rentabilidad por dividendo del 4,62% según los pagos estimados para 2023, y ha puesto en marcha un pequeño programa de recompra de acciones. Pero puede jugar en su contra su todavía elevado endeudamiento, reconoce Castelo. También hay que tener en cuenta que es un valor poco líquido, con un free float (capital que circula libremente en Bolsa) de apenas un 8%.
El 77,8% de las casas de análisis que siguen el valor aconsejan comprar y ninguna se inclina por vender. Su recorrido alcista asciende al 55%.
● Grenergy. El desarrollador y productor independiente de energías verdes tiene el viento en cola. “El conflicto bélico está impulsando a las empresas de energías renovables como posible alternativa al petróleo y gas ruso, lo que sumado a los esfuerzos de los diferentes gobiernos para combatir el cambio climático dotan al sector de un gran atractivo en el corto, medio y largo plazo”, justifica Pinto. Desde que Rusia inició la invasión de Ucrania el pasado 24 de febrero, las acciones de Grenergy se han revalorizado en torno al 50%.
También le han dado apoyo los “magníficos” resultados presentados, con un incremento del ebitda del 75%, gracias principalmente a las ventas de proyectos solares y de generación de energía, a pesar de las grandes inversiones realizadas en Latinoamérica, agrega el experto de XTB. La compañía acababa de anunciar su entrada en Alemania.
Sube cerca del 30% en 2022, a lo que puede sumar más del 17% a un año vista.
● Tubacex. El productor de tubos y aleaciones sin soldadura para los sectores de petróleo y gas, generación de energía y petroquímico brilla como el tercer valor más rentable de la Bolsa española en 2022, con un alza del 47,8% Los expertos creen que el buen momento se prolongará. “Los inversores saben que cuando los precios de la energía suben, Tubacex se beneficia de ello. La mejora del mercado al que la compañía dirige sus productos es evidente, especialmente en el sector del gas y en el sector nuclear. También el sector petróleo, sobre todo en las facetas de extracción y producción ha aumentado mucho sus pedidos. Además, los resultados de los dos últimos trimestrales han sido muy buenos y la reciente presentación de un nuevo plan estratégico ha convencido a los analistas.
Juega a favor de la compañía su capacidad para fijar precios. También que después de años de disminuciones en las inversiones en el sector, empresas y gobiernos se han visto obligados a aumentarlas. Y, en tercer lugar, la creación de nuevas líneas de negocio que le permitirán diversificar su dependencia de un sector. Le puede pesar su elevado endeudamiento.
Cerró ayer en 2,22 euros y el consenso de Bloomberg le da alas hasta los 3,41 euros.
Invertir en pequeños valores españoles es rentable. Tres de los cuatro fondos de inversión de Bolsa española que más se revalorizan en 2022 tienen a compañías de este perfil entre sus mayores posiciones. En el Azvalor Iberia FI, que lidera el ránking con un 17,44%, Tubacex, Técnicas Reunidas, Elecnor, Logista y Prosegur Cash son los cinco valores con más peso. March International Iberia Class S Eur, que sube un 17,23, incluye a Arima como su principal apuesta. El EDM International Spanish Equity I Eur, que gana un 11,17%, tiene a Catalana Occidente, Gestamp y CAF.
de la deuda como una oportunidad con futuro.
David Cano, socio de AFI, ha vuelto a invertir en deuda soberana alemana en los últimos meses por primera vez en mucho tiempo.
“Si piensas que la inflación se va a contener, el bono alemán a 10 años, al 1% es una gran oportunidad para empezar a tomar posiciones”, indica, al tiempo que señala que también han comprado bonos italianos y españoles con el exceso de liquidez que mantenían fruto de la infraponderación de los últimos tiempos.
“Es muy difícil establecer cuándo será el momento ideal, especialmente con acontecimientos geopolíticos como la guerra de Rusia de fondo, pero pensamos que se debe considerar la deuda soberana en la segunda mitad del año”, señala también David Ardura director de inversiones de Finaccess Value, que considera que el inversor en deuda está ante una oportunidad que se presenta una vez en la vida.
Para los muchos expertos, el tiempo de los bonos flotantes y los títulos ligados a la inflación ha pasado, tras haber alcanzado unas revalorizaciones importantes y lo que podría ser ya el pico del crecimiento desatado de los precios.
Pero no todos lo tienen tan claro. Los expertos de Vanguard temen que el objetivo de moderar la inflación sea más difícil de lo esperado y las cuentas no les salgan a los inversores si se mantiene este crecimiento de precios.
“Sigue presente el riesgo de que la inflación resulte ser más duradera de lo esperado o de que la Fed y el resto de los bancos centrales caigan en una sobrerreacción con sus políticas para tratar de contenerla”, asegura Vanguard.
Además de en la deuda a corto plazo, estos analistas consideran que hay valor en los bonos de emergentes –que han perdido un 20% de su valor, pero parecen haber acabado con el ciclo de alzas de tipos– y en la renta fija corporativa con alta calidad crediticia y menores posibilidades de impago incluso en entornos difíciles.
Pensando que el titular de estas líneas podría ser El último buen verano de nuestras vidas opto por el usado en aras de descubrir trazas de un optimismo escapista que no encuentro.
Zona levantina compartiendo estancias entre Castellón y Alicante con varios denominadores comunes, como gran afluencia de personas en la playa y paseando (sin gastar), viviendas cerradas (sin inquilinos) e inusitado calor. Con la cesta de la compra en la mano, el personal apunta a llenar su despensa con alimentos económicos ante las alzas de los precios, marcas ‘muy’ blancas para ingestas sin lujo. Similar variable en la restauración, donde sube la carta un 20%, si bien, a pesar de los pesares, los refectorios de gamas medias y bajas están completos, pero facturan menos que otros años, pues los comensales eligen pitanzas asequibles.
Otra reflexión. Donde antes imperaba la clase media irrumpen familias de perfil menor, con mayor gasto en alojamiento pero menor en ocio, y extranjeros en edad jubilar con ánimo de alargar su estío en un clima –para ellos– mejor que el propio.
Otro punto a remarcar: el calor. Temperaturas elevadas que han mejorado las ventas de aireadores de bajo precio para conciliar el descanso pero con consecuencias en la naturaleza con incendios sin control.
El cambio climático es una realidad reconocido hasta por el propio Biden en su renovado programa presidencial; no se ha cuidado el entorno olvidando la prevención y ahora el fuego ahoga en todos los sentidos.
El verano se nos va a antojar eterno y en breve deberemos eliminar alguna estación del año. ¿Qué pensará de esto el cuñado negacionista de un expresidente del Gobierno?
Por concluir, ¿quién duda que cualquiera tiempo pasado fue mejor?