El infalible itinerario de los mejores expertos
Ciclos formativos, másteres, cursos de especialista, en modalidad presencial o a distancia, de larga o corta duración... Escuelas de negocios y universidades redoblan sus opciones formativas con el fin de preparar a profesionales actualizados y aptos para
‘LIFELONG LEARNING’
Como en el centro de la diana, la máxima puntuación en el mundo laboral se encuentra exactamente en una palabra: especialización. Nos hayamos inmersos en un mercado de trabajo altamente competitivo, cambiante, exigente, tecnológico, digital, entrenado, experimentado y constantemente actualizado. Completar un grado profesional no es suficiente y menos en este contexto de transformación, avivado por el Covid-19, en el que las universidades y escuelas de negocios han apostado por redoblar sus opciones formativas.
Lo han hecho y lo siguen haciendo a la máxima velocidad posible, con el objetivo de dar respuesta a “las dificultades que están teniendo muchas empresas, especialmente del sector tecnológico, para conseguir profesionales expertos”, argumenta Fabiola Pérez Ramos, CEO y cofundadora de Mioti, una escuela de referencia en España en el ámbito de las nuevas tecnologías. Esta carrera contrarreloj requiere mejores zapatillas, más concienciación, tenacidad, esfuerzo, inquietud, readaptación, superación y motivación. Por y para los alumnos, sean jóvenes estudiantes o profesionales ya en activo.
De esta forma, se intensifican los ciclos formativos, títulos de formación profesional (FP), nacen nuevos grados, se multiplica el abanico de los másteres y otras titulaciones de posgrado, los cursos de experto, la formación online… Concretamente, según la Estadística de Estudiantes Universitarios elaborada por el Ministerio de Educación, el número de alumnos que se matricularon en programas de posgrado en el curso 2020-2021 creció un 174% en comparación con las cifras correspondientes al año 2015-2016. Pasaron de 90.392 a 248.460.
Superación continua
Existe una demanda absolutamente creciente en busca de actualización, diferenciación y mejora de la situación laboral. En este sentido, hay un informe (Panorama de la educación 2020) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) que indica con claridad que un máster aumenta las posibilidades de encontrar un empleo hasta un 84%.
Sin embargo, este no es el único fin de un posgrado. Tal como reflejan los datos del sistema estatal de indicadores de la educación de 2021 (del Ministerio de Educación), el sueldo de los profesionales con este tipo de titulación se incrementa en unos 24.600 euros respecto al de alguien que sólo tiene un grado, lo que supone cerca de un 36% más.
Y tampoco hay que olvidar que este tipo de formación promueve el acceso a puestos de gestión y dirección. Es decir, ayuda a dar saltos en la carrera laboral dentro de una empresa. A tenor del Informe Infoempleo Adecco: Oferta y Demanda de Empleo en España de 2020, un 26% de las ofertas que piden candidatos con pos
El número de alumnos matriculados en un posgrado ha crecido un 147% durante los últimos cinco años
grado proceden de empresas que buscan profesionales de dirección.
En definitiva, son útiles para encontrar trabajo, promocionar, cambiar de profesión o de empresa, incrementar el salario… Las opciones son muy diversas y el itinerario ideal depende del objetivo y el momento laboral en el que se halla cada individuo.
No es necesario que la ruta pase por un grado necesariamente. De hecho, los ciclos de formación profesional están en pleno auge y se prevé que esta tendencia se mantenga en los próximos años. “Los cursos de FP son más cortos y por eso están cogiendo fuerza, especialmente los de carácter técnico”, expone Pérez Ramos. Ahora que el mercado laboral tiene una necesidad insatisfecha de este tipo de profesionales, “las escuelas de formación profesional ofrecen trabajadores en menos tiempo y con una formación más práctica”.
Cada ciclo de FP consta de dos cursos y tiene una duración de 2.000 horas, que se complementan con un periodo de prácticas en un entorno real de trabajo. Por su parte, el grado universitario requiere de cuatro años académicos.
Según las cifras publicadas por el Ministerio de Educación y Formación Profesional, las matriculaciones en formación profesional se han incrementado un 65% durante los últimos 10 años. Concretamente, en el curso 2020-2021, el aumento fue del 9,3% respecto al de 2019-2020. La FP viene a suponer el camino más directo hacia el empleo. De hecho, el último informe del Observatorio de las Ocupaciones del SEPE afirma que su tasa de empleabilidad es ya del 42,2%, siendo la de los estudios universitarios del 38,5%.
¿Y después del ciclo formativo? Ahí no acaba la sed de mejora. Precisamente para este tipo de alumnado existen cursos de especialización. Equivaldrían a los másteres universitarios para los graduados. En este contexto sería el posgrado de la FP. Un nivel superior.
Complementan, profundizan y amplían conocimientos y competencias a los titulados de FP. Constan de unas 300-600 horas, lo que equivale a unos seis meses. Los estudiantes pueden elegir entre una amplia temática de