Última llamada para el dividendo de Telefónica
El lunes es el último día para comprar acciones de la operadora con derecho a cobrar el dividendo de 0,15 euros por acción en efectivo que abonará el 15 de diciembre.
PAGO A 1,2 MILLONES DE ACCIONISTAS
Última llamada para los inversores que quieran cobrar el próximo dividendo de Telefónica. Este lunes acaba el plazo para comprar acciones con derecho al abono de 0,15 euros por acción en efectivo que realizará la operadora el próximo 15 de diciembre a cuenta de los resultados de 2022, y que supone una rentabilidad por dividendo cercana al 4,3% al cierre del viernes.
La compañía, que cae un 9,81% en Bolsa en 2022 y ha dicho adiós a más de 2.000 millones de capitalización bursátil, es seguida muy de cerca por sus 1,2 millones de accionistas, de los que el 30% son minoristas, según los datos del último informe anual.
Telefónica pagará con cargo al ejercicio 2022 un total de 0,30 euros, la mitad el día 15 y el resto en junio. Ambos abonos suponen una rentabilidad por dividendo del 8,6% al cierre de ayer.
El consenso de analistas que sigue Telefónica fija su precio objetivo en 4,55 euros por acción, un 31% por encima de su cotización, pero por debajo del máximo en 4,91 que alcanzó el pasado mes de mayo. Desde entonces cae un 29,28%.
Los analistas consideran que el valor es atractivo a medio plazo y adecuado para los inversores que buscan dividendo, con esa rentabilidad superior al 8% para los próximos años. Es un retorno que está entre los más altos del sector en Europa y por encima de rivales como Deutsche Telekom y Orange, comenta Álvaro del Pozo, analista de Banco Sabadell, que aconseja el valor a los inversores que dan importancia a la remuneración.
“Las oportunidades y los riesgos están equilibrados. Por el lado positivo, destacan el nuevo foco en eficiencia de costes, hasta ahora inferior a la de sus competidores y el potencial de sinergias en Brasil y Reino Unido”, apunta
Elena Fernández-Trapiella, analista de Bankinter.
“En el tercer trimestre, en mercados clave como Brasil y Alemania registró dinámicas de crecimiento por encima de lo esperado y en España cumplió expectativas”, explica Del Pozo, que destaca que Telefónica mantienen sus previsiones de crecimiento para 2022. Aunque reconoce que las presiones inflacionistas son un riesgo de cara a 2023, la compañía tiene palancas para mitigar el impacto, como subida de precios bajo la estrategia más por más, cobertura de los costes energéticos y eficiencias.
A su favor tiene su fuerte posición competitiva en España, la posibilidad de crecimiento en Brasil, Reino Unido y Alemania y la “monetización de infraestructuras y posibles desinversiones en hispanoamérica”, señala Juan Peña, analista de GVC Gaesco Valores. Iván San Félix, de Renta 4, resalta su liderazgo estratégico. “Fue el primero de los grandes que apostó por la fibra y después por monetizarla”, comenta el experto, que destaca su apuesta integrando servicios de telecomunicaciones y de tecnología
Su talón de Aquiles es que la deuda sigue elevada (26.700 millones a cierre de septiembre). No obstante, los expertos resaltan que el 74% de su endeudamiento es a tipo fijo y tiene un vencimiento medio de 13 años, lo que mitiga el impacto de mayores tipos de interés. “Tiene más de 22.000 millones de euros de liquidez, vencimientos cubiertos para los tres próximos años y un patrimonio neto de más de 25.000 millones”, añade Fernández-Trapiella.
Peña reconoce que el sector se ha quedado atrás este año debido a los problemas de baja rentabilidad de las compañías, alto capex (inversiones) y elevada competencia. Pero Telefónica ofrece una exposición a mercados como Brasil y una reestructuración estratégica y financiera casi terminada. Contrasta con otras empresas como Vodafone, que está comenzándola.
Los analistas ponen en el foco la decisión de la Comisión Europea sobre la alianza entre MásMóvil y Orange, ya que determinará la posibilidad de que el mercado consolide o no en el corto y medio plazo. Pero creen que habrá que esperar al segundo semestre de 2023, según GVC.
Aconsejan vigilar los próximos resultados, ya que confían en que cumpla los objetivos del año. “En el cuarto trimestre debería ser más palpable el impacto de la oferta de fútbol, unos costes de la energía más comparables a los del pasado año y la reducción de plantilla en España”, apuntan en Bankinter.
Los principales riesgos a los que se enfrenta el valor son la intensidad competitiva en España y la evolución de las divisas latinoamericanas (por su alta exposición a la región). Como en otras empresas, un empeoramiento macroeconómico con incremento de costes jugaría en su contra. GVC Gaesco no descarta que limite su dividendo a medio plazo.