Un Calderón de la Barca muy ‘british’
VERSIÓN Declan Donnellan viaja a Madrid con ‘La vida es sueño’.
Corría el año 1989 cuando el inglés Declan Donnellan se atrevía a traer a Madrid su particular visión de Fuenteovejuna, una de las obras cumbres del Siglo de Oro español y la pieza teatral más universal de Lope de Vega. El británico, que se confiesa un enamorado de las letras españolas, en particular de las de esa época, “por la misma razón que amo a Shakespeare”, ha vuelto después de más de treinta años a España para subir al escenario La vida es sueño, de Calderón de la Barca.
Tras su estreno en Sevilla y su paso por diferentes ciudades españolas, esta coproducción de LAZONA y la Compañía Nacional de Teatro Clásico, dirigida por Donnellan y Nick Ormerod –codirectores de la compañía Cheek by Jowl–, se puede ver ya en el Teatro de la Comedia interpretada por un elenco español (Ernesto Arias, Prince Ezeanyim, David Luque, Rebeca Matellán, Manuel Moya, Alfredo Noval, Goizalde Núñez, Antonio Prieto e Irene Serrano). Para Lluís Homar, director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, que Cheek by Jowl lleve esta obra a escena es “un sueño” (valga la redundancia) porque esta compañía es “referencia internacional en cuanto a una mirada sobre los autores clásicos”. Para Donnellan, el sueño lo está viviendo él al conseguir llevar a Calderón de la Barca a escena y hacerlo en español. “Estoy comprometido con cada proyecto que hago. Ahora tengo entre manos el texto de Calderón y he puesto toda mi energía en él”, explica Donnellan, que cree que La vida es sueño es probablemente “el mayor logro del Siglo de Oro español”.
De la misma opinión es Miguel Cuerdo, director de Producción de LAZONA, que señala que es “historia del teatro, con mayúsculas. Un título emblemático de nuestro repertorio. Es el ejemplo del teatro que trasciende el escenario y se convierte en referente popular, ¿quién no sabe terminar la frase ‘porque la vida es sueño…’? Es la prueba de que el teatro ha gozado de una posición relevante en la sociedad y de que importa y sirve, también hoy. Pero la producción que tenemos entre manos, además, es historia viva porque habla de puentes, de viajes, de mestizaje, de romper barreras, no sólo del idioma sino de la manera de trabajar, de crear entendimiento. Es un lujo que Declan Donnellan haya dirigido por fin a un elenco español. Son años de conversaciones, de sueños, de esfuerzo, de ilusiones. Y hoy, por fin, es un sueño cumplido”.
Pero, ¿qué implica para Donnellan? “El teatro nos permite ser independientes, caminar sin hacerlo como borregos, y creo que esa es su fuerza, de ahí que su futuro siga siendo glorioso”, afirma el director nacido en Manchester. También de los autores clásicos, que nos ponen frente al espejo de nuestros valores y que, en parte, con sus textos, han dado forma a lo que somos. Así, para Donnellan, Calderón de la Barca no habla de la muerte si no de la existencia, de la necesidad de que los demás nos oigan y no sientan, algo que sigue muy vigente en la sociedad actual. “Creo en la posibilidad de hacer un mundo mejor, pero expresiones como ganar sí o sí o cumplir tus sueños hoy dan pavor”, concluye.
Tras más de treinta años, Declan Donnellan vuelve a Madrid con un texto del Siglo de Oro español
“El teatro nos permite ser independientes, caminar sin hacerlo como borregos, y creo que esa es su fuerza”