Magallanes muere en una batalla absurda
EN MACTÁN El capitán de la Flota de las Especias fallece sin cumplir el objetivo de la expedición: llegar al Maluco.
7 de abril de 1521, Cebú. Tras navegar e inspeccionar varias islas del actual archipiélago de Filipinas –denominado así años más tarde en honor al siguiente monarca, Felipe II, hijo del patrocinador de esta expedición– solo tres naves de la Armada de las Especias que lideraba Fernando de Magallanes (la Concepción, la Victoria y la Trinidad) atracan en un territorio próspero guiadas por aborígenes vecinos. “No se entiende cómo el capitán, en vez de poner rumbo al sur o al suroeste desde las Marianas hacia las Molucas, sigue hacia el oeste. Quizás fue porque intuía que la Especiería quedaba en el hemisferio portugués, delimitado por el Tratado de Tordesillas, y aspiraba a hallar nuevos enclaves llenos de valiosísimas especias para Carlos I”, considera Agustín R. Rodríguez González, doctor en Historia y miembro de la Real Academia de la Historia.
Los caquices locales, el rey Humabón y consorte, sin oposición, se convierten al cristianismo, son bautizados junto a multitud de súbditos y se hacen vasallos del rey español.
“Como agradecimiento, Magallanes le otorga a la reina una pequeña talla de madera negra del Niño Jesús [que el arzobispo de Sevilla le había entregado antes de partir] que, cinco siglos después, aún se venera en la isla”, relata el historiador.
Para asegurar el dominio en la comarca, Magallanes pide a los dirigentes vecinos que se sometan al monarca de Cebú. Todos acceden salvo Lapu Lapu, el rajá de Mactán, un islote cercano. Aún avisado de la resistencia de estos indios, se empeña en castigar esta insurgencia y toma personalmente el mando de la acción. “Una auténtica tontería que enciende una rebelión indígena que le cuesta la vida”, apunta el doctor en Historia y autor de La primera vuelta al mundo. 1519-1522 (Edaf). “Como conocían a nuestro capitán, contra él principalmente dirigían los ataques y, por dos veces, le derribaron el casco; sin embargo, se mantuvo firme mientras combatíamos rodeándole. Duró el desigual combate casi una hora. En fin, un isleño logró poner la punta de la lanza en la frente del capitán, quien, furioso, le atravesó con la suya, dejándosela clavada. Quiso sacar la espada, pero no pudo, por estar gravemente herido en el brazo derecho; se dieron cuenta los indios y uno de ellos, asestándole un sablazo en la pierna izquierda, le hizo caer de cara, arrojándose entonces contra él. Así murió nuestro guía, nuestra luz y nuestro sostén”, relató el cronista Antonio Pigafetta en su cuaderno de bitácora. El
La isla de Cebú, hoy el segundo centro económico de Filipinas tras Manila, y la pequeña Mactán, están unidas por dos puentes. En esta última se ubica el aeropuerto internacional, que recibe cada año miles de viajeros seducidos por una variada oferta turística, la belleza natural de ambos destinos y sus atractivos culturales.
Cruz de Magallanes. Como símbolo de la evangelización, el capitán de la Flota de las Especias ordena plantar una gran cruz de madera, custodiada en una capilla Basílica del Santo Niño, aunque se desconoce si es la original. capitán general de la expedición que debía llegar al Maluco fallece el 27 de abril de 1521 fruto de las heridas sufridas durante una batalla intrascendente, menor. “Muere como un héroe. Se le considera un navegante, pero era, sobre todo, un militar, un guerrero, un hombre de armas, un oficio mucho más noble en la época que el de marino, y como tal pierde la vida”, señala Rodríguez. Su cuerpo, así como el de los marinos que también perecieron en esa contienda, nunca se recuperó.
A su muerte, como dispuso el propio Magallanes en su testamento –se conservan fragmentos de este documento en el Archivo Histórico Provincial de Sevilla–, su esclavo, Enri
Basílica del Santo Niño. Mandada construir en 1565 en el lugar exacto en el que los soldados a las órdenes del colonizador Miguel López de Legazpi hallan la figura del Niño Jesús, es la iglesia más antigua del país donde hoy se exhibe la talla. También alberga un museo de historia.
Fuerte de San Pedro. Primer asentamiento defensivo español que conserva bienes auténticos de la segunda mitad del XVI.
Monumento de Magallanes. Erigido por orden de Isabel II a mitad del XIX en el actual parque que de Malaca o Enrique el negro, sería puesto en libertad. Pero el capitán sucesor, Duarte Barbosa, se niega. “El siervo, enfadado, conspira con el rey de Cebú y juntos tienden una emboscada [una cena trampa] y traicionan a Barbosa, cuñado de Magallanes, en la que pierde la vida el 1 de mayo”, junto con una veintena de miembros de la flota, apunta Rodríguez.
Con una tripulación mermada a la mitad por las bajas en combate y por enfermedades, sobre todo escorbuto por las largas travesías en alta mar, insuficiente para gobernar las tres naves, deciden prender fuego a la Concepción. Tras un periplo caótico y sin rumbo por los laberintos de islas y con toda la marinería en contra, el piloto João Lopes Carvalho es depuesto. Y el 7 de noviembre de 1521 la nao Victoria con Juan Sebastián Elcano al mando y la Trinidad con Gonzalo Gómez de Espinosa llegan a la isla Tidore, en las Molucas, cumpliendo así el objetivo de la Flota de las Especias que su primer capitán jamás llegó a ver. Impulsado por su arrojo, había descubierto el paso interoceánico, surcado en diagonal un océano antes desconocido, hallado Guam y las Marianas y arribado a Filipinas.
DOS ENCLAVES CON ATRACTIVA OFERTA TURÍSTICA
Santuario Mactán, dónde se cree que perdió la vida el líder de la armada al servicio de Carlos I.
Shangri-La Mactán. A pie de playa, este lujoso resort de 354 habitaciones y suites, cuenta también con una zona para huéspedes mayores de 12 años y un campo de golf de seis hoyos.
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