“El objetivo de Haya es cerrar el año con un ebitda superior a 50 millones”
En cuanto a la evolución del sector inmobiliario, Enrique Dancausa advierte de que, de momento, no se ha producido una caída de las ventas, aunque reconoce que sí se espera unas ralentización de la actividad para los primeros meses de 2023, que afectará más en volúmenes que en precios.
También anticipa un freno en compraventa de carteras de créditos dudosos (NPL en sus siglas en inglés) por las diferentes expectativas en precios entre comprador y vendedor.
Para el directivo, a medio plazo la gestión de deuda va a ganar protagonismo debido a un mayor volumen de activos distressed (con riesgo de impago) sobre todo a finales de 2023 y 2024. “Será una deuda concentrada en pymes y aquí las entidades pueden tener una mayor necesidad de servicios. Haya goza de experiencia, tenemos equipos especializados y una herramienta digital (Fenix) de gestión de deuda”, avanza.
La compañía reforzará también su negocio de desarrollo inmobiliario que le permitirá cerrar 2022 con la entrega de 2.000 viviendas y de gestión de activos en alquiler.
De cara al cierre de año, el CEO de Haya prevé que la compañía finalizará el ejercicio con un ebitda sin extraordinarios superior a los 50 millones. “Somos una de las empresas del sector que más ebitda y cash flow generamos en España”, asevera.
A cierre de junio, últimos datos publicados, Haya contaba con 26.055 millones de euros en activos bajo gestión, unos ingresos de 94 millones y un ebitda ajustado de 27,4 millones de euros. La compañía cerró el primer semestre con unas pérdidas de 43 millones. Entre sus principales clientes, además de Cerberus, figuran CaixaBank, BBVA y Cajamar.