El Banco de Inglaterra compra más bonos y ve riesgo para la estabilidad
El banco central incluye en el plan de emergencia bonos ligados a la inflación y las gestoras quieren mas tiempo.
El Banco de Inglaterra ha ampliado su programa de emergencia de compra de bonos de 65.000 millones de libras al incluir títulos ligados a la inflación, en un intento más de parar el incendio que sufre el mercado y su impacto en los planes de pensiones, que suponen un “riesgo material para la estabilidad financiera del país” (ver Lex Column). Es la primera vez que compra deuda ligada a la inflación, paso que ayudó a calmar el mercado de gilt, los títulos con garantía del Estado en libras.
El Banco de Inglaterra saca munición para comprar hasta 5.000 millones de libras al día en este tipo de bonos ante la escalada del rendimiento de estos títulos. El supervisor compró ya 1.950 millones en el primer día de intervención en bonos ligados a inflación. Un día antes, el Banco de Inglaterra había elevado la compra máxima por día del programa de emergencia a 10.000 millones de libras, con la esperanza de que sirva de válvula de escape para los planes de pensiones, que viven una tormenta desde el anuncio, el 23 de septiembre, del “mini” presupuesto que provocó una estampida de los inversores en los gilt.
Desde Downing Street insisten en que Liz Truss no planea descartar los recortes de impuestos pese a las sucesivas intervenciones del banco central. Según avisó ayer el consejero financiero del FMI, Tobias Adrian, la única forma de que la rentabilidad de los bonos británicos bajen es si el gobierno da marcha atrás en la rebaja de impuestos.
Ayer, los fondos de pensiones pidieron al Banco de Inglaterra extender su plan de emergencia más allá del viernes, ya que argumentan que las gestoras no tienen suficiente tiempo para preparar sus carteras ante la posibilidad de nuevas sacudidas. Piden mantenerlo al menos hasta que el gobierno aclare sus planes de recorte de deuda, a finales de octubre.
Pero el Gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, enfatizó en una intervención en el Instituto de Finanzas Internacionales en Washinton que el apoyo del banco central durará hasta el viernes. Los planes de pensiones están entre los principales actores del mercado de bonos, ya que necesitan casar sus activos con los compromisos de pago a sus pensionistas a largo plazo. El sector privado de pensiones admite que el 72% de sus activos está en bonos; el 47% son gilt.
Los planes de pensiones definidas utilizan el sistema de inversión LDI, guiada según los compromisos de pago, para casar activos y compromisos. Con la caída en picado en estos títulos, los planes debieron aportar nuevas garantías por sus programas LDE. Los fondos sin suficiente liquidez tuvieron que vender activos, lo que provocó una espiral de ventas que afectó a otros activos.