Los restaurantes de Domino’s duplican el beneficio en España
Domino’s Pizza, la cadena de pizzerías controlada por el grupo Alsea, recuperó en 2021 la práctica totalidad de sus ventas previas a la pandemia en España y mejoró su resultado, según recogen las cuentas de Grupo Zena Pizza, la sociedad que concentra el grueso de su negocio en el mercado nacional.
El documento refleja que los 292 restaurantes propios de Domino’s en España, diez más que un año antes, facturaron 215,4 millones de euros durante el pasado ejercicio, lo que supone un crecimiento del 23% frente a 2020 y una cifra de negocio muy cercana a los 220,7 millones de 2019.
No obstante, su beneficio de explotación fue de 16,4 millones, el doble que en 2020, y su resultado neto ascendió a 11,98 millones de euros, un 87% más. Ambas cifras suponen batir las ganancias de 2019, cuando la compañía tuvo un resultado de explotación de 13,7 millones y un beneficio neto de 10,5 millones.
La totalidad del beneficio se destinó a reservas. De hecho, las cuentas de Grupo Zena Pizza muestran que la sociedad sólo ha repartido dividendos durante el último lustro en 2018, cuando distribuyó un total de 10 millones.
Domino’s es la marca que más está impulsando en España el grupo mexicano de restauración Alsea, que controla sus intereses en el país, donde también suma enseñas como Starbucks, Vips o Ginos, a través de la sociedad Food Service Project.
En los nueve primeros meses de 2022, la compañía ha inaugurado otros 12 restaurantes propios de Domino’s, hasta sumar un total de 304. Por su parte, las unidades subfranquiciadas ascienden a 64, una menos que al finalizar 2021. El grupo suma, por tanto, un total de 368 puntos de venta operando bajo esta marca en el país.
Grupo Zena Pizza indica en sus cuentas que, al finalizar el pasado ejercicio, tenía un
Se ha convertido en la marca que más está impulsando Alsea en España, con 11 aperturas en 2022
fondo de maniobra negativo de 2,56 millones de euros, frente a los 16,24 millones también negativos de 2020, pero que esta circunstancia no plantea “problemas en la situación financiera de la sociedad debido a su capacidad y expectativas de generación de beneficios futuros”.
El documento señala también que, al finalizar el ejercicio, disponía de 15 millones de euros en pólizas de crédito no dispuestas. Además, el 19 y 28 de enero de 2022, procedió a la amortización anticipada de 446.000 y 159.000 euros, respectivamente, del préstamo ICO de un millón de euros que selló con Ibercaja.
Por su parte, el 25 de enero de este mismo año, la compañía interpuso un recurso contencioso-administrativo ante la Audiencia Nacional solicitando la suspensión cautelar de la ejecución de una deuda tributaria de 1,08 millones, correspondientes al pago del impuesto de sociedades de los ejercicios 2013 a 2016.
La empresa contaba al finalizar el pasado ejercicio un total de 6.293 empleados en el mercado nacional, lo que supone un incremento de más de 1.000 trabajadores frente a los 5.109 al acabar 2020.