EL TONO ‘VIVA MAGENTA’ ES ELEGIDO EL COLOR DEL AÑO
Cómo evitar el triste de enero
Gris, negro, verde, azul, morado y marrón o beige son tonalidades con las que se debe tener cuidado en este mes frío, el más triste del año
“Un rojo poco convencional para una época poco convencional”, “asertivo pero poco agresivo”, “valiente e intrépido, que vibra con vitalidad y vigor”. No, no define a ningún político (por el momento, cuesta encontrar un rojo, un azul, verde o naranja con esas características). Nos referimos al Viva Magenta 18-1750, un color rosado vibrante con toques de púrpura que pertenece a la familia de los rojos y que ha sido seleccionado por la famosa empresa Pantone como el color de 2023.
Una tonalidad que presenta el equilibrio entre los cálidos y fríos, que hará más llevadero este enero azul. Mes que incluye el Blue Monday, considerado el día más triste del año en base a una fórmula matemática desarrollada por el psicólogo Cliff Arnall que tiene en cuenta diferentes variables como el clima, el nivel de endeudamiento tras las fiestas, la melancolía, la motivación en la vuelta al trabajo o el reto de adquirir nuevos hábitos (en relación con experiencias anteriores...). Todo ello, este lunes 16, además con la amenazante variable Kraken del Covid llamando de nuevo a las puertas de los hospitales, en esa constante incertidumbre geopolítica, con la continuidad de la guerra en Ucrania y un imparable alza de los precios. Pero ese estado taciturno de enero se puede contrarrestar con optimismo, incluso con la ayuda de los profesionales de la salud –los psicológos fueron los profesionales de la salud más demandados en nuestro país el año pasado, un 18% más que en 2021– y también con algunos consejos en decoración y moda que nos ayuden a iniciar el año con mejor energía y ánimo.
Además del citado Viva Magenta, ya sea en zapatillas, paredes o vestidos –yo voy a ver si funciona como fondo de pantalla del ordenador–, los expertos en diseño y decoración de la firma británica Stelrad, dan algunos tips de colores a evitar este invierno, entre ellos, el azul, junto a otros como el negro, el lila o el verde.
“La forma en que los tonos afectan a nuestras emociones depende en gran medida del brillo, la sombra, el matiz o el tono del color. En el caso de la decoración, si estamos pensando en pintar la casa [si es que ya hemos guardado en el trastero todos los adornos de Navidad], opte por colores que puedan ayudar a iluminar su habitación y crear una sensación de calidez”, explica el interiorista Chris Harvey, de Stelrad.
Así, los colores a evitar serían:
Negro: “No debería sorprender, ya que provoca sentimientos de tristeza y puede hacer que te sientas desmotivado cuando todavía está oscuro afuera”. Si desea agregar negro en decoración, mejor si es solo en el marco de una puerta, los estantes o el marco de la ventana. “Úselo con moderación para ayudar a que las características de su habitación destaquen en lugar de tragarse el espacio en un agujero negro”.
Azul: “Es un color complicado, ya que puede ser calmante, pero también puede estresar si se elige un azul demasiado frío u oscuro. Las estancias se pueden percibir frías si se elige el tono incorrecto, especialmente si carece de luz natural”, añade Harvey. En todo caso, si opta por este color, “asegúrese de usar tonos cálidos en sus acentos para ayudar a equilibrar este efecto frío”.
Gris. Neutro por excelencia y uno de los más trendy en decoración para el hogar, es el momento de deshacerse de él y traer un color diferente que inspire un nuevo aire. “Puede ser conocido por ser elegante, pero se come la vitalidad necesaria para afrontar el mes más triste del año”.
Verde. Según el dicho, quien con verde se atreve por guapo se tiene. Pero, ojo, porque se trata de un color que puede hacer que se sienta perezoso o deprimido. Según el experto de Stelrad, si desea traer el verde a una habitación, concéntrese en esos colores terrosos y de aspecto natural, pero asegúrese de no usar mucho verde, ya que esto puede causar sentimientos de rechazo.
Morado. Tonalidad calmante y reconfortante, popular símbolo de empoderamiento femenino, en el hogar es habitual en los dormitorios y baños, ya que inspira la relajación. Pero carece de la calidez necesaria cuando aún está oscuro fuera y puede hacer que su hogar se sienta frío si no se acompaña de los muebles adecuados y colores complementarios, como pueden ser el naranja o amarillo.
Marrón. Junto al beige, pueden ser buenos colores neutros, pero demasiado de uno u otro puede crear una sensación de vacío en el hogar. “Es un tono que pide ayuda de otros para encontrar el equilibrio. En decoración, paredes blancas y muebles marrón oscuro, con espejos que reflejen la luz”.
En vista de las emociones que generan estos recurrentes colores, habrá que aprovechar que estamos en enero para redecorar la vida; mejor a ritmo de Bebe Rexha y David Guetta y su I’m good (que ya no blue), aunque hoy les tiente más el nuevo hit de Shakira.