Heathrow suspende el dividendo en 2023 pese a tener beneficio
El grupo, que está participado en un 25% por Ferrovial, ganó 130 millones de euros en 2022
Heathrow, el aeropuerto de Londres participado por Ferrovial con un 25%, ha conseguido mejorar sensiblemente sus resultados. El grupo ganó 114 millones de libras (unos 130 millones de euros) en 2022, frente a las pérdidas de 1.613 millones de libras de un año antes. La mejora es fruto del crecimiento del tráfico hasta 62 millones de pasajeros, 20 millones más que un año antes.
La compañía, que dejará de estar dirigida por John Holland-Kaye, no pagó dividendo en 2022 y tampoco tiene previsto pagar este año pese a dar la vuelta a la cuenta de resultados. “Preferimos mantener una gestión conservadora”, indicó ayer el grupo. Heatrow indicó que el beneficio ajustado sigue siendo negativo en 684 millones de libras, la mitad que hace un año.
“No se pueden mantener las tasas actuales que permiten que las aerolíneas vuelvan al beneficio y al dividendo mientras nosotros seguimos en pérdidas”, dijo ayer el CEO de la compañía al que se le está buscando sucesor tras nueve años al mando.
Heathrow ha pedido al regulador aeroportuario británica CAA que incremente las tasas por pasajero que, de manera interina, se han fijado en 31,57 libras en 2023 hasta que se determine la carga definitiva. El aeropuerto de Ferrovial movió el año pasado 62 millones de pasajeros, 20 millones más que en 2021, pero aún no ha recuperado los niveles prepandemia. Para evitar las tensiones en el aeropuerto producidas en las últimas navidades, Heathrow ha incrementado la plantilla, con 25.000 trabajadores que han vuelto a trabajar en las instalaciones en los últimos 18 meses.
Crece la deuda
La mejor marcha del grupo se ve en la caja generada por las operaciones, que se ha casi triplicado, pasando a 1.719 millones de libras. El ebitda ajustado de la empresa sube hasta 1.684 millones, un 338% más que en 2021.
Los ingresos totales llegaron en 2022 a 2.913 millones de libras, un ascenso del 140% determinado por el crecimiento tanto de la parte regulada como de las tiendas. La deuda neta se sitúa por encima de los 14.000 millones de libras, 1.000 millones más que en 2021, con un coste financiero medio del 3,64%.