Apple aumenta su apuesta por China
AirPod a AirPod, el proveedor chino Luxshare Precision está conquistando el mundo. El plan de la empresa de convertirse en el principal proveedor de Apple está a punto de cumplirse. Empezó produciendo los auriculares inalámbricos de Apple. Ahora tiene la vista puesta en los visores de realidad aumentada (RA) del fabricante del iPhone.
Por primera vez, se ha contratado a un proveedor chino para desarrollar un nuevo producto prémium de Apple. Luxshare ya puede añadir los visores de RA a la lista de productos Apple que suministra, que incluye el iPhone y el Apple Watch.
La incomodidad de los visores y los mareos han dificultado la adopción masiva de los dispositivos de RA. Pero Apple tiene la mayor plataforma de RA del mundo. Sus esperados visores son los que más posibilidades tienen de convertir esta tecnología en un producto de uso generalizado.
También se espera que los dispositivos de RA sean uno de los productos más caros de Apple, con precios previstos de entre 3.000 y 5.000 dólares (2.800 y 4.700 euros). La contratación de una empresa local china para el desarrollo y la producción iniciales evidencia la mejora de la calidad de los proveedores chinos. También pone de relieve la dificultad de diversificar la fabricación fuera de China.
Para Apple, crear puestos de trabajo en China es un buen paso. Las ventas de productos de Apple en el país siguen siendo fuertes a pesar de los confinamientos del año pasado. La empresa alcanzó su mayor cuota de mercado mensual en China en el último trimestre. Diversificar los proveedores también ayuda a reducir los problemas de producción.
Las acciones de Foxconn triplicaron su valor en dos años tras su salida a Bolsa en 2006. Los cambios más notables que se produjeron en ese tiempo fueron los primeros pedidos para fabricar iPhones y MacBooks de Apple. Son buenas noticias para los pacientes tenedores de acciones de Luxshare.
La inteligencia artificial promete ser la ayuda definitiva. Start up como la firma de San Francisco Abacus.AI ofrecen utilizar la IA para ayudar a las empresas a realizar cálculos complejos, como predecir la pérdida de clientes. Pilot AI es un grupo en fase inicial que trabaja en una tecnología que, según afirma, convertirá las llamadas de ventas en notas detalladas.
Las empresas de IA generativa que crean nuevos contenidos a partir de datos existentes están obteniendo cientos de millones de dólares en financiación a pesar del desplome de las valoraciones en el resto del sector tecnológico. La financiación aumentó un 33% el año pasado a algo menos de 1.400 millones de dólares. La cifra de este año superará con creces ese total, gracias a nombres como Microsoft o AWS, de Amazon.
¿Durará? La IA puede aguantar más que la Web3, que estuvo de moda a estas alturas del año pasado y que ha caído en desgracia con el hundimiento de las criptomonedas. El recorte de costes y el análisis de datos corporativos son aplicaciones más prácticas que la especulación financiera con token no fungibles.
Las empresas saben que apresurarse a unirse a la tendencia ya está siendo recompensado en los mercados. Las ganancias del mercado bursátil deberían mantener al alza las valoraciones de las start up de IA.
Fundado en 1856, Credit Suisse (CS) es el segundo mayor banco suizo y capitaliza en Bolsa 11.100 millones de francos (11.200 millones de euros).
El valor cotiza a un múltiplo de 0,26 veces sobre el valor tangible contable y acumula una caída del 83% en cinco años, frente al alza del 11% de su competidor UBS. En 2022 los ingresos del banco cayeron el 34% y la pérdida atribuible se multiplicó por 4,4 veces hasta 7.293 millones de francos, si bien la pérdida ajustada antes de impuestos fue de “solo” 1.249 millones.
Las cifras no se alejaron de la guía y el grupo destacó en positivo la ratio CET1 del 14,1% (+1,5 puntos sobre septiembre), reforzada por la ampliación de capital de 4.000 millones de noviembre. En 2022 Credit Suisse sufrió una reducción neta de depósitos de 123.200 millones de francos y una caída del 19,8% en los activos bajo gestión hasta 1,29 billones de francos. En conjunto, el balance se contrajo un 30%, cerrando con activos de 531.358 millones. En octubre pasado CS presentó un nuevo plan estratégico focalizado en gestión de patrimonios y en el rentable banco universal en Suiza. El plan contempla la escisión del banco de inversión (que recupera la marca Credit Suisse First Boston), la reducción de la base de costes en 2.500 millones y el logro de una Rote “core” superior al 8% en 2025.
Este año Credit Suisse anticipa una pérdida todavía importante, pero hay foco.