La banca defiende la seguridad jurídica de España pese a discrepar del Gobierno
Ignacio Galán, presidente de Iberdrola, ha sido de los directivos de energía más críticos con la regulación del Gobierno, pero en repetidas ocasiones ha manifestado el compromiso de Iberdrola con España y con su sede social, en Bilbao.
Lo mismo le ha ocurrido a Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol, la empresa más perjudicada por el nuevo impuesto a energéticas y bancos, con 450 millones este año. De los más de 6.000 millones de beneficio neto de Repsol de 2022, la mitad correspondieron al negocio de exploración y producción (upstream), que está fuera de España. De los 11.195 millones de ingresos de Acciona Energía en 2022, el 44% correspondieron a España y el resto al exterior, sobre todo EEUU y Latinoamérica.
En 2021, Acciona Energía ya lograba más ebitda fuera de España (555 millones), que en España (531 millones). Con el excepcional comportamiento de los precios energéticos en 2022, Acciona tuvo 1.255 millones de ebitda en España en 2022, frente a 398 millones a nivel internacional.
Banca muy nacional
Ninguno de los dos grandes bancos nacionales con fuerte implantación en terceros países, Santander y BBVA, tienen planes para cambiar su sede (Santander y Bilbao respectivamente), según fuentes cercanas a ambos.
Aunque no quieren hacer declaraciones públicas sobre el impacto que pueda tener la decisión de Ferrovial de trasladar su sede social a los Países Bajos, sí se manifiesta en fuentes conocedoras que existen claras diferencias entre el comportamiento de la empresa controlada por la familia del Pino y la práctica de las entidades financieras.
La diferencia más relevante, estratégica, se centra en el hecho de que los dos bancos tienen decidido que pagan sus obligaciones fiscales en los países donde tienen actividad y que, por lo tanto, hacerlo en algún área geográfica donde su presencia sea nula o prácticamente inexistente entraría en contradicción con sus principios.
La segunda, influida claramente por la primera, es que el peso de la actividad en España de los dos grandes bancos internacionales en sus balances es muy importante. “Sin entrar a valorar las posibles razones que han llevado a Ferrovial a anunciar su cambio de sede, nosotros tenemos en torno a la mitad del balance global comprometido en España”, se señala en fuentes cercanas a los dos bancos.
Como respuesta indirecta a la afirmación de Ferrovial de que en Países Bajos existe una mayor seguridad jurídica, en medios próximos a las entidades se niega que se pueda señalar que en España “no la haya, aunque es evidente que discrepamos de algunas de las decisiones que el Gobierno ha adoptado últimamente” lo que les está llevando, por ejemplo, a recurrir judicialmente la imposición del gravamen por los considerados beneficios extraordinarios que han tenido que abonar a Hacienda apenas hace dos semanas.
En otros ámbitos relacionados con el sector financiero se señala que “si Ferrovial puede decidir cambiar su sede social de país se debe, en buena medida, a que no tiene clientes minoristas a los que colocar sus productos y servicios”. En este sentido, explican estas personas, la facturación en España de Ferrovial depende sustancialmente de convocatorias públicas, con sus condicionantes legales correspondientes, a las que puede presentarse al cumplir los requisitos exigidos, independientemente de que su sede esté radicada en España o en cualquier otro país de la UE, al existir plena libertad de circulación de bienes y servicios.
Hay otras multinacionales cotizadas con alto peso exterior que tampoco van a trasladar su sede fuera de España. Grifols es una de ellas. El líder en hemoderivados factura fuera el 94% de sus ingresos. Tampoco tiene pensado mover su sede social Fluidra, el fabricante de piscinas que factura en el exterior un 90,4%.
Ignacio Galán, muy crítico con el Gobierno, está comprometido con su sede en Bilbao
Grupos con gran peso exterior como Grifols y Fluidra descartan mover sus sedes fuera