Solo 7.000 viviendas de Sareb están en capitales de provincias, el 15%

OFERTA REDUCIDA/ De las 46.542 viviendas con las que cuenta Sareb, solo 15 de cada 100 se ubican en las principales ciudades, con 1.189 inmuebles en Madrid capital, 1.105 en Murcia o 767 en Barcelona.

El alquiler de vivienda en España es un drama y lo seguirá siendo a corto plazo, a pesar del anuncio a bombo y platillo lanzado el domingo por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien anticipó que “vamos a aprobar la movilización de 50.000 viviendas de Sareb para alquiler a precio asequible para jóvenes y familias”. Apenas un parche, si no una tirita con claro barniz electoral, para solventar “el problemón” del acceso a la vivienda, como lo calificó el propio Sánchez. Y no solo porque las cifras contenidas en el plan, al que el Consejo de Ministros dará luz verde hoy mismo, se encuentran a años luz de la demanda: el déficit de vivienda en alquiler ronda los 2,5 millones en nuestro país, según un reciente informe de Fotocasa, mientras que la consultora Atlas Real Estate estima que harían falta 1,83 millones de pisos en alquiler para converger con las principales economías europeas. Sino también porque de las miles de viviendas en manos de Sareb solo una parte muy modesta se encuentra en las capitales de provincias. Esto es, de las 46.542 viviendas con que cuenta Sareb en estos momentos, solo 7.088 están ubicadas en capitales de provincias (el 15% del total) que son, por definición, las zonas que mayor oferta requieren.

Por ejemplo, en Madrid capital, Sareb solo cuenta con 1.189 viviendas (2.709 si se contabilizan todas las disponibles en la provincia); seguida de Murcia, con 1.105 (3.485 en toda la provincia); Barcelona, con 767 en la capital (6.997 a nivel provincial); 347 en Girona (1.776), o 335 en Valladolid (672). En Palma de Mallorca, junto a Barcelona y Madrid, una de las ciudades más tensionadas de España, Sareb apenas cuenta con 99 viviendas, mientras que en Málaga capital el número no es muy superior: 102.

Las 39.448 viviendas restantes en cartera de Sareb se reparten a lo largo y ancho de la geografía española, en localidades de menor tamaño y, a priori, menos tensionadas, aunque por CCAA, Cataluña y Comunidad Valenciana aglutinan el 48% (13.499 la primera y 8.897 la segunda).

Además, no todos esos in

muebles se incorporarán al plan de Sánchez. De hecho, de las más de 46.500, lo harán menos de la mitad. Entonces, ¿de dónde salen las 50.000 viviendas prometidas por Sánchez? De esa cifra, cerca de 21.000 serán viviendas “en fase de comercialización o en obras para su adecuación”, inmuebles que la sociedad pone a disposición de las CCAA y ayuntamientos “que quieran

comprarlas para aumentar su parque de vivienda social”. A su vez, de esa cifra, alrededor de 9.000 son viviendas “ya terminadas y listas para entrar a vivir”, explican desde Sareb,

mientras que otras 11.900 necesitan reformas. Los 29.000 pisos restantes prometidos por el presidente del Gobierno para alquiler o no existen de momento o están ocupados, como es el caso de 14.000 inmuebles (ver información adjunta). Otros 15.000 están aún por construir. En el marco del Proyecto Viena, Sareb ha identificado 112 suelos para construir 10.000 viviendas por fases

que se ubicarán esencialmente en Cataluña, Comunidad Valenciana, Castilla y León y Extremadura, iniciativa a la que se podrían sumar más suelos para edificar 5.000 viviendas adicionales. En otras palabras, la propuesta de Sánchez, con la que entra de lleno en la precampaña electoral, apenas araña la superficie de un problema que es estructural en España.

De las 50.000 viviendas del ‘plan Sánchez’, 21.000 son casas en fase de venta o en reforma