El pacto de Hungría y Criteria para la opa Talgo, en vía muerta
La solución Abertis para Talgo es una opción pero, a día de hoy, no ha sido abierta por ninguna de las tres partes implicadas en la operación de compra del fabricante de trenes. Ganz Mavag, el consorcio que ha lanzado la opa sobre Talgo, sigue adelante con la oferta sin responder a las advertencias del Gobierno y sin miedo a una contraopa del brazo inversor de la Caixa.
Fuentes próximas a los inversores magiares recalcan que no se ha abierto ninguna línea de comunicación para replantear su oferta con barniz más español, como ocurrió en 2018 en Abertis, donde Atlantia se vio forzada a compartir el poder sobre la concesionaria con ACS. “No ha habido ninguna aproximación”, recalcan, mientras siguen trabajando en la documentación exigida por la subdirección de Inversiones Exteriores, el departamento encargado de elaborar el informe que servirá para que el consejo de ministros autorice con condiciones o vete la opa húngara.
Entre los asuntos que más preocupan al Gobierno figura la transferencia de tecnología, especialmente la patente de eje desplazable de Talgo que para el ministro de Transportes español, Óscar Puente, es clave en un contexto bélico marcado por la guerra entre Rusia y Ucrania.
Según la documentación que maneja el consorcio liderado por András Tombor, en Europa hay, al menos, otros cinco fabricantes que comercializan una tecnología de ancho variable tanto de pasajeros como mercancías (donde Talgo no opera).
La española CAF dispone del bogie (eje) Brave que Renfe emplea en las series S120 y S121 desde 2006. Por su parte,