La junta de Indra restaura el consejo con 7 nuevos vocales
CRISIS DE GOBERNANZA/ La firma tecnológica quiere cerrar una etapa convulsa, pero aún se prevé inestabilidad en la cúpula.
La tecnológica Indra dio ayer el primer paso para cerrar la crisis de gobernanza en que se ha visto envuelta. La junta extraordinaria de accionistas aprobó la supresión del voto de calidad o dirimente del presidente no ejecutivo, Marc Murtra, y el nombramiento de 7 nuevos consejeros, 6 independientes y uno, Juan Moscoso, del hólding estatal Sepi, primer accionista de Indra con cerca de un 28%.
Con estos nombramientos, el consejo queda constituido, por ahora, con 14 miembros, de los que los independientes ocupan siete puestos, ya que, además de los seis vocales nombrados en la junta, también figura como independiente Francisco García Sanz, exnúmero dos del grupo Volkswagen.
El pasado jueves presentó su dimisión el otro vocal independiente, Ignacio Martín, como había anunciado en junio tras liderar, como presidente de la Comisión de Nombramientos, la selección de los nuevos independientes.
Los seis consejeros independientes que la junta refrendó ayer son Belén Amatriain, exdirectiva de Telefónica; Virginia Arce, exsocia del sector de tecnología de PwC España; Olga San Jacinto, asesora de estrategias de transformación; Coloma Armero, abogada, exsocia de
Uría Menéndez; Axel Arendt, exdirectivo de Rolls-Royce, y Bernardo Villazán, un conocido directivo del sector tecnológico. Villazán sustituyó a última hora a Felipe Fernández Atela, exresponsable de Deutsche Telekom en España y presidente y CEO de Adea, una firma de servicios digitales para empresas, que fue descartado por la potencial incompatibilidad de sus cargos en Adea con Indra.
Los nombramientos de los seis consejeros independientes fueron respaldados por más del 98% del capital presente o representado, tras alcanzar un quorum récord del 75,01%. Resulta significativo que el vocal propuesto por Sepi, Juan Moscoso, fuera el que obtuvo menos apoyo de todos, un 76,73%, es decir, 22 puntos menos que sus otros compañeros de consejo. El 76% del quorum equivale a un 57% del capital total. Como la alianza de Sepi, Sapa y Amber, que fue la que logró la destitución de los anteriores vocales independientes, controla, conjuntamente, alrededor de un 46% del capital, significa que sólo un 11% del capital en manos de minoritarios ha apoyado a Moscoso. La supresión del voto dirimente del presidente fue la que concitó más apoyo, con un 99,98%.
Al suprimir el voto de calidad, se recupera el papel que los independientes tenían antes, desde el punto de vista de que, al constituir el 50% del consejo –7 vocales de un total de 14– éstos, que representan a los minoritarios, podrían teóricamente bloquear una decisión de la empresa con la que no estuvieran de acuerdo y que fuera apoyada por los consejeros dominicales y los ejecutivos. Pero antes tenían más poder porque eran una clara mayoría de 7 sobre 13 vocales.
La estabilidad futura en la cúpula de la firma, incluso tras la recomposición del consejo, es difícil ya que es un secreto a voces el creciente desencuentro entre Murtra y el consejero delegado del grupo, Ignacio Mataix, y la intención del presidente de forzar la salida del CEO. En la nueva composición del consejo, Coloma Armero preside la Comisión de Nombramientos.
Juan Moscoso, el nuevo consejero por Sepi, sólo recibió un 77% de apoyo frente al 99% del resto
El consejo tiene ahora catorce vocales con siete independientes por la presión de CNMV
Abertis refuerza su patrimonio neto con la aportación de los derechos de crédito de ACS y Atlantia
informa Reuters. CRT y GIC poseen un 4,5% y un 8,3%, respectivamente, del grupo de infraestructuras. El holding de los Benetton, Edizione, es el mayor accionista de Atlantia con el 33%.
Abertis sigue atenta a nuevas inversiones orgánicas e inorgánicas. El grupo español mantiene un diálogo con las administraciones concedentes para alargar los plazos