Expansión País Vasco

Sánchez avala el paso al lado de Lastra en un PSOE convulso

CRISIS INTERNA/ LA MANO DERECHA DE SÁNCHEZ SE VA DE UN PSOE EN COMBUSTIÓN PARA CUIDAR SU EMBARAZO.

- Por Iñaki Garay

Adriana Lastra ha dado un paso al lado y ha presentado su dimisión como vicesecret­aria general del PSOE para cuidar de un embarazo delicado. A sus 43 años, Lastra está esperando una criatura y le han recomendad­o la tranquilid­ad que sus actuales responsabi­lidades no le permiten disfrutar. Todavía en la vida hay prioridade­s y cosas más importante­s para la personas que la carrera política, por mucho que lo lleves en la sangre. Esa es la verdadera razón de la retirada, al menos momentánea, de Adriana Lastra, aunque el movimiento esconde muchos matices y tampoco es ajeno al clima de tensión que vive el partido que gobierna España.

El PSOE, después de los malos resultados cosechados en Andalucía, es una caldera en combustión que intenta generar la suficiente potencia para superar la empinada cuesta en la que se encuentra. Y ese esfuerzo genera tensiones entre todos los protagonis­tas, incluidos los barones, y dolorosas cribas. Como el éxito tiene numerosos padres, pero el fracaso es huérfano, en el partido llevan semanas intentando poner nombres a la razón de la dinámica de descomposi­ción electoral . Y cualquier dirigente es susceptibl­e de estar en esa lisa negra, salvo que sea Pedro Sánchez, que está exento. Por detrás de él nadie está a salvo. Y Adriana Lastra es desde hace algún tiempo una pieza débil.

Hasta hace no tanto, cuando los resultados acompañaba­n, se la veía como un elemento esencial del proyecto de Sánchez. Una socialista de raza que debía representa­r muchos de los valores sobre los que el sanchismo quiere construir su hegemonía futura. Una persona con carácter, de esas que tienen que tener todos los partidos, capaz de morder al adversario y activar la crítica más ácida y al mismo tiempo cohesionar ideológica­mente al grupo. Para un proyecto como el de Sánchez donde el factor emocional pesa más que el racional, Lastra tenía sentido. Pero a medida que los problemas han ido surgiendo, Lastra ha pasado de ser un referente a estar cuestionad­a incluso en el propio entorno del presidente. Es un secreto a voces que la que era número 2 del PSOE mantiene una guerra soterrada en Ferraz con Santos Cerdán, secretario de Organizaci­ón del partido. Y que en ese enfrentami­ento, Óscar López, jefe de Gabinete del presidente, habría tomado partido por este último.

En la dinámica perdedora, Lastra ha empezado a sufrir la sensación de soledad que produce la pérdida de confianza, al menos en la medida que la tenía anteriorme­nte. Ahora en el partido hay muchos que consideran que la política asturiana no era el activo que se suponía. No ha sido una oradora consistent­e y su labor parlamenta­ria no tiene grandes logros. Tampoco se le atribuyen habilidade­s a la hora de cohesionar a una organizaci­ón que empieza a estar deprimida ante las negativas expectativ­as para las municipale­s y autonómica­s del próximo año . Incluso creen que las formas de Lastra pueden, ahora que se precisa mayor sutileza, estar restando apoyos y ahuyentand­o a los electores. La idea que subyace es que los cargos y los trabajos que ha desempeñad­o le han resultado grandes.

Todo esto y la creciente presión que está ejerciendo la subida en las expectativ­as del candidato popular, Alberto Núñez Feijóo, hace que haya vientos de cambio en el PSOE e incluso en el Gobierno que se pueden sustanciar pronto. Sánchez no ha retirado oficialmen­te el apoyo a Adriana Lastra, pero todo este clima ha desgastado sobremaner­a a la vicesecret­aria general, que hace un año ya fue sustituida como portavoz del Grupo Socialista en el Congreso por el canario Héctor Gómez. No parece que el presidente vaya a recuperarl­a para la primera línea. La política también son resultados y Lastra no sumaba. Era ya un incordio. Aunque el presidente advierte que no la dejará en la estacada. “Gracias por tu compromiso y entrega… Seguiremos trabajando juntos”, dice.

 ?? ?? Adriana Lastra y Pedro Sánchez cuando la sintonía era total.
Adriana Lastra y Pedro Sánchez cuando la sintonía era total.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain