Airbus ajusta la producción por la incertidumbre global
Airbus ajustará la cadencia de producción del A320, su avión superventas, ante las tensiones en la cadena de suministro provocadas por el “complejo entorno operativo”. La situación “geopolítica y económica” está generando “incertidumbres adicionales” en la industria y provocando “desafíos en la cadena de suministro” que obligan a revisar los planes de recuperación tras la pandemia, señala la compañía.
Airbus mantiene sus previsiones para este año gracias al buen rendimiento del negocio en el primer semestre, según explicó ayer su consejero delegado, Guillaume Faury. Sin embargo, retrasará en seis meses el calendario de incremento de producción del A320, de modo que no alcanzará las 65 unidades anuales hasta 2024. Sigue confiando en lograr un ritmo de 75 aviones A320 en 2025.
Tras la pandemia, el A320, de pasillo único y gran éxito comercial gracias a su capacidad para responder a la actual demanda de viajes, se ha convertido en el estandarte de la recuperación de Airbus. La compañía acaba de realizar además el primer vuelo del A321XLR, que entrará en servicio en 2024.
Gana un 15% menos y retrasa en seis meses el ritmo de fabricación del avión estrella, el A320
Ganancias
Airbus también informó ayer de sus resultados en el primer semestre del año. Ganó 1.901 millones de euros, un 15% menos, después de incrementar un 1% los ingresos, hasta 24.810 millones. El área de Defensa fue el gran catalizador de la facturación, con 4.922 millones, un 26% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior.
El beneficio operativo cayó un 5% y se situó en 2.579 millones, mientras que el flujo de caja sigue en niveles superiores a los 7.000 millones de euros, un 7% menos. De los impactos asumidos durante el semestre, destaca uno de 218 millones de euros asociado al programa del A400M debido a la inflación.
La empresa prevé ahora entregar cerca de 700 aviones comerciales este año y mantiene sus objetivos de cerrar el ejercicio con un beneficio operativo de 5.500 millones de euros y cerca de 3.500 millones de euros de flujo de caja antes de operaciones.
La compañía sigue gozando de una elevada liquidez, fruto en parte de las medidas adoptadas para hacer frente al golpe del Covid. Dispone de una posición de liquidez de 27.600 millones de euros después de recomprar bonos por 1.000 millones de euros. También ha ampliado esta variable al elevar de 6.000 a 8.000 millones de euros su crédito revolving.