Teresa Ribera avisa de la corrosión y falta de seguridad en centrales nucleares de Francia
Expansión.
La vicepresidenta Tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, defendió ayer el mantenimiento de un calendario de cierre ordenado de las centrales nucleares en España. Es más, dijo que las plantas francesas “tienen problemas de corrosión y falta de seguridad derivadas de la acumulación de tiempo”. Todo ello, en el contexto de los problemas de suministro energético que está causando Rusia en Europa del Este, Alemania,
Austria e Italia, y que puede agravar más, con sus cortes de suministro de gas. En declaraciones a Antena 3, Ribera dijo que el calendario es “importante” para tener “ordenado” todo el sistema de cierre de manera que se pueda asegurar que hay una capacidad de entrada (de energía) alternativa. En principio, las centrales nucleares españolas deben paralizarse entre 2027 y 2035.
La vicepresidenta añadió que este calendario permitirá que todas las operaciones de desmantelamiento de las centrales nucleares se hagan “con la máxima seguridad” y con la capacidad de los ingenieros y personas expertas que puedan colaborar en estas tareas. “Es clave”, defendió Ribera, que incidió en que, “por supuesto, por encima de todo está la seguridad nuclear” por la que debe velar el Consejo de Seguridad Nuclear.
De manera indirecta, la vicepresidenta rechazó las propuestas del Partido Popular y de Vox de revisar el calendario de cierre de las centrales nucleares, y recordó los problemas que tienen las centrales francesas. “Tenemos que estar también muy atentos a la sorpresa tan tremenda con la que se ha encontrado Francia en muy buena parte de sus centrales nucleares”.
Ribera explicó que “tienen problemas de corrosión y de seguridad muy serios que conllevan que varias de sus plantas estén cerradas a consecuencia de la acumulación de tiempo”. Y también por la dificultad de intervenir y seguir manteniendo a pleno rendimiento centrales de sus características, con el máximo nivel de seguridad.
La vicepresidenta añadió que “no es descartable que, en cualquier momento, Rusia haga un corte total de suministro de gas” hacia Europa. En todo caso, añadió que “es harto improbable” que, en esa eventualidad, hubiese cortes de energía en España, porque no depende del gas ruso como otros países de la UE. España recibe gas de Argelia y de Estados Unidos, fundamentalmente.