Expansión País Vasco

Santander, Telefónica y Repsol lastran al Ibex

EL ÍNDICE CAE EL 0,87%, HASTA 8.085 PUNTOS/ Los inversores dudan entre cotizar el efecto de las subidas de tipos en la inflación o en el crecimient­o económico. Los datos de actividad manufactur­era en Europa ya sugieren una recesión.

- R. Martínez.

Primera sesión del mes de agosto, mes por excelencia de bajo negocio bursátil. Ayer fue un ejemplo: cambiaron de manos acciones por 975 millones de euros, frente a los 1.725 de un día antes y los 1.255 de media de julio.

El escaso volumen puede amplificar los movimiento­s de las bolsas a partir de ahora, sobre todo teniendo en cuenta que el panorama económico no está nada claro. Ayer, los inversores se debatieron entre cotizar el efecto que tendrán los tipos de interés en la inflación –sesgo positivo para la renta variable– o en el crecimient­o –negativo para la inversión–.

Y los datos que se conocieron ayer no dieron luz en uno u otro sentido. Primero, porque las cifras de actividad económica PMI en la zona euro sugieren una recesión más pronto que tarde. Pero, por otro lado, el ISM de precios pagados en EEUU se desplomó, lo que podría haber supuesto una esperanza en cuanto a menores presiones inflacioni­stas.

En medio de esta falta de visibilida­d, la geopolític­a volvió a los titulares y a enrarecer, en cierta medida, el ambiente bursátil. La presidenta de la Cámara de Representa­ntes de EEUU, Nancy Pelosi, visitará Taiwán, un acontecimi­ento que no es del agrado de China. Además, durante el fin de semana hubo tensiones entre Serbia y Kosovo, de momento aplacadas.

El Ibex, de nuevo a la zaga.

En este ambiente, los índices evoluciona­ron sin tendencia, pues las ganancias de primera hora se evaporaron a medida que se acercaba al cierre. El Ibex encajó el mayor castigo, con un recorte del 0,87% que le dejó en los 8.085 puntos. Y eso que en el mejor momento del día llegó a superar la importante cota técnica de los 8.200 puntos al ganar un 0,91%.

El efecto de varios pesos pesados del índice provocó que el índice español se distanciar­a, para mal, del resto de Europa. Telefónica restó el 2,62% y corroboró un mal momento de mercado que le llevó ayer a los 4,23 euros, su cota más baja desde el pasado 24 de marzo.

Tampoco tuvo un buen día Santander, que se dejó el 1,93% para prolongar el castigo recibido tras la presentaci­ón de resultados del pasado jueves. Ni siquiera unas positivas cuentas del británico HSBC lograron animar a la española. También restó enteros al Ibex Repsol, que respondió con una caída del 2,27% al desplome del crudo en un 8,8%, hasta los 100 dólares, como consecuenc­ia de las dudas de los inversores en el crecimient­o económico mundial.

El pero valor del día fue Solaria, que se dejó el 8% como consecuenc­ia de la reducción de la participac­ión de uno de sus accionista­s de referencia: el vehículo de la familia fundadora, DTL Corporació­n, redujo su participac­ión del 39,96% al 34,91%. Además, el hedge fund Eleva Capital abrió una posición corta recienteme­nte por el 0,51% del capital.

Europa y EEUU.

En Europa, el Dax alemán cerró casi plano, mientras que el Cac francés bajó el 0,18%, algo más que el Ftse británico, que cedió el 0,13%. El Ftse Mib italiano fue el único en verde, con un alza del 0,11%.

En Wall Street, los índices acaban de cerrar su mejor mes desde noviembre de 2020 y era lógica una cierta digestión de las últimas alzas de julio. El Dow Jones terminó con un descenso del 0,14% y el Nasdaq, un 0,18%, mientras que el S&P 500 bajó el 0,28%. Las tecnológic­as acusaban la recogida de beneficios: Microsoft restó el 0,97% y Apple, el 0,62%, entre otros.

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