Tensión en la UE por los 200.000 millones de Alemania en ayudas a empresas y hogares
Expansión.
A finales de septiembre, el Gobierno de Alemania se desmarcó de las respuestas comunes a la crisis con el anuncio de un macropaquete de ayudas de 200.000 millones de euros para rebajar la factura energética de las empresas y los alemanes. Ese anuncio ha ido macerando entre sus socios europeos, provocando un creciente malestar que ya ha empezado a hacerse visible. “Hay un principio en el mercado único que es la igualdad de condiciones y no podemos alejarnos de este principio de igualdad en la competencia. Esto supone que más allá de decisiones individuales legítimas tomadas por los Estados miembros definamos esta estrategia económica global”, afirmó ayer el ministro de Economía francés, Bruno Le Maire, en alusión al macroplan de ayudas de Alemania. Lo hizo a su llegada a la reunión de ministros de Finanzas de la eurozona en Luxemburgo, enfatizando que cualquier estrategia contra la crisis debe pasar por la coordinación permanente entre los Estados europeos, focalizando las ayudas para dirigirlas a los hogares y empresas que más los necesiten y buscando la solidaridad entre países.
Aunque Bruselas evitó criticar o valorar el plan alemán, ayer dejó entrever que lo vigila de cerca, subrayando su compromiso con la preservación de “la igualdad de condiciones en el mercado único”. Precisamente, el principal temor entre los Estados europeos es el riesgo de fragmentación de ese mercado interior, algo que hay que evitar, señaló el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni. “La solidaridad no está sólo sobre los hombros alemanes. Creo que esto es algo que tenemos que dialogar a nivel europeo”, señaló Gentiloni. Por su parte, el presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe, recalcó la importancia de coordinar las políticas económicas nacionales de cara a mejorar la resiliencia de la zona euro. Una respuesta global que también defiende España. “En este momento en que nos enfrentamos también a un reto global y a un reto internacional, tenemos que actuar unidos”, afirmó la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, mientras que el ministro belga, Vincent van Peteghem, recordó que el “proyecto europeo se basa en la solidaridad, en trabajar juntos”. Alemania defendió que su paquete de ayudas es “proporcionado” al tamaño de su economía.
Los socios europeos reclaman a Alemania una respuesta global y coordinada a la crisis energética