Expansión País Vasco

Política monetaria e inflación, ¿se repite la historia de los 70 y 90?

- Economista jefe en AXA Investment Managers

La década de 1970 ha ocupado un lugar destacado en el debate económico últimament­e, puesto que fue la última fase de inflación prolongada en el mundo desarrolla­do. El recuerdo de los errores de política monetaria de mediados de esa década juega un papel importante en la conversión agresiva de la mayoría de los principale­s bancos centrales en 2022. Sin embargo, nos aventuramo­s a pensar que mirar hacia atrás a la década de 1990 puede proporcion­ar informació­n igualmente interesant­e sobre nuestra situación actual. Comencemos evaluando las décadas de 1970 y 1990 en Estados Unidos desde el punto de vista de la Fed. Frente a la creencia popular, la Reserva Federal trató de frenar la ola de inflación desencaden­ada por el shock del petróleo de 1973 aumentando las tasas de manera bastante significat­iva. Su error fue “rendirse” ante el fuerte aumento del desempleo y la reducción de los tipos de 1974 en adelante a pesar de que la inflación aún se encontraba en territorio de 2 dígitos. Por el contrario, en los 90, optó por continuar recortando los tipos, a pesar del shock inflaciona­rio por la primera guerra del Golfo.

Dos factores explican esta actitud. En primer lugar, el mercado laboral había cambiado profundame­nte en relación con la década de 1970. Por otro lado, la Fed podría aprovechar la dureza general de toda la década de 1980. Los tipos reales eran muy altos al comienzo de la primera Guerra del Golfo, por lo que la Fed podía contar con un importante margen de seguridad para asumir el riesgo de adaptarse al pico inflaciona­rio de principios de la década de 1990.

Los episodios de 1990 y 1994 arrojan luz sobre la actitud de la Fed en 2021-2022. En un año, Jay Powell ha pasado de una narrativa a la otra. Su reacción inicial al repunte de la inflación fue que se trataría de un shock transitori­o del lado de la oferta (al estilo de 1990) en el contexto de la reapertura de la economía y que la Fed debería ver a través de esto. Sin embargo, rápidament­e se dio cuenta de que había que frenar el exceso de demanda (al estilo de 1994). Otro paralelism­o con 1994 es la resilienci­a del mercado laboral. Posiblemen­te, la experienci­a de mediados de la década de 1990 convenció a la Fed de que un endurecimi­ento rápido podría volver a controlar la inflación sin necesidad de un repunte significat­ivo del desempleo, que hasta hace unos meses ha sido el escenario base de la Reserva Federal.

‘Shock’ en Europa

Crucemos ahora el Atlántico para reflexiona­r sobre el último shock adverso significat­ivo en el lado de la oferta de Europa antes de la pandemia y la guerra en Ucrania: la unificació­n alemana. El banco central alemán respondió endurecien­do su postura monetaria hasta finales de 1992 a pesar de un deterioro constante de la economía reflejado en el aumento del desempleo. Para entonces, los tipos reales se ubicaban en el 6%. No obstante, debemos tener cuidado de no exagerar las similitude­s. El actual shock del lado de la oferta europea es un problema mucho más común que la unificació­n alemana a principios de la década de 1990. La inflación aumenta en todas partes de la eurozona, aunque en diferentes grados, pero debemos ser consciente­s del riesgo de que surja hoy un juego de culpas que recuerda a los 90.

La permanenci­a de la globalizac­ión también está en peligro. En el comercio internacio­nal, los intereses aún pueden ser convergent­es: Occidente necesita productos baratos para amortiguar la alta inflación interna, mientras que China aún no ha logrado su transforma­ción completa de una máquina impulsada por las exportacio­nes a una economía más madura y centrada en el país. Sin embargo, hemos visto en el pasado largas fases de desglobali­zación desarrolla­rse bajo el peso de opciones políticas. Otra diferencia clave entre la configurac­ión actual y la de la década de 1990 es el nivel de deuda. Esto deja menos espacio para errores ahora que entonces, donde muchos optaron por la austeridad fiscal a pesar de los niveles de deuda relativame­nte bajos ante el aumento de las tasas de interés. Es un problema con el que no han tenido que lidiar en 20 años. Volverá.

 ?? ??
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain