Fluidra se hunde un 15% en Bolsa al rebajar previsiones
INDUSTRIA/ La multinacional de piscinas acusa el elevado nivel de existencias de los distribuidores. Jordi Rubiralta, expresidente de Werfen, aflora un 5,05% del capital.
Fluidra está viviendo su particular annus horribilis, aunque la jornada de ayer fue una de las peores. La multinacional de equipamiento para piscinas se desplomó un 14,83% en Bolsa después de rebajar sus previsiones de ventas para el tercer trimestre del año y el conjunto de 2022. La multinacional se encuentra bajo el asedio de los hedge funds bajistas desde hace meses y es la compañía del Ibex 35 que pierde más valor en el acumulado del año, con una caída del 63,3%. Ahora ha bajado de los 13 euros por acción.
Fluidra ha corregido sus previsiones a la baja por unas condiciones de mercado más débiles de lo previsto entre julio y septiembre. La compañía ha comunicado que espera unas ventas de 520 millones de euros en el tercer trimestre, que ya tiene preliminarmente cerrado, lo que representa una caída del 7% ajustada por divisa. El beneficio bruto de explotación (ebitda) será de 95 millones.
Para el conjunto de 2022, el grupo ha echado el freno a la estimación de crecimiento de entre el 12% y el 17% para dejarla en un 10%, con una facturación de 2.400 millones y un ebitda por encima de los 500 millones de euros.
Fluidra explica que se ha visto obligada a revisar su guidance de este ejercicio por la corrección de inventario que se está produciendo en el sector. La demanda acelerada de piscinas que se produjo en 2020 y 2021 como consecuencia de las restricciones sanitarias hizo que los distribuidores de material para piscinas compraran existencias masivamente. El miedo a quedarse sin stocks debido a los problemas en la cadena de suministro por la pandemia y la incipiente inflación, que anticipaba una fuerte subida de precios, también influyeron en este comportamiento de los clientes de la multinacional, especialmente en Norteamérica.
La incertidumbre macroeconómica, con el incremento del coste de la energía, la presión alcista del IPC y la subida de tipos de interés, han debilitado la demanda. Todo ello, con los almacenes todavía llenos de los distribuidores, han llevado a la compañía de Sant Cugat (Barcelona) a replantear sus objetivos de 2022.
Deterioro del margen
Según los analistas de Renta4, “el deterioro del margen ha sido considerable durante el tercer trimestre, prácticamente cinco puntos porcentuales, lo que puede indicar que la compañía no ha sido capaz de implementar la subida de precios anunciada en abril”, debido a la actual reducción de inventarios.
En una conferencia con inversores celebrada ayer, no obstante, Fluidra se mostró optimista sobre la evolución del negocio, al que calificó de “robusto”, y vaticinó la transición hacia un patrón de pedidos normalizado que asegure un crecimiento en línea con sus alzas de ventas históricas, de en torno al 5%.
En este contexto, la multinacional acaba de dar entrada en su accionariado a Jordi Rubiralta Giralt, accionista y expresidente del grupo sanitario Werfen, que ha aflorado una participación del 5,05%. Al cierre de ayer en Bolsa, este paquete está valorado en 124 millones de euros. Los principales bajistas de la compañía, Fosse Capital Partners, Marshall Wace, Kintbury y AKO Capital, controlan cada uno entre el 0,79% y el 0,92%.
El grupo reduce el crecimiento de entre el 12% y el 17% al 10%, con ventas de 2.400 millones
La empresa es la que más valor pierde del Ibex 35 en lo que va de año, con una caída del 63%