Expansión País Vasco

Las multinacio­nales, en alerta ante una oleada activista en Wall Street

ESTADOS UNIDOS/ Las grandes cotizadas temen que las caídas en Bolsa y la nueva regulación, que facilita la elección de consejeros propuestos por accionista­s, desaten una rebelión entre los inversores.

- Sergio Saiz.

Bob Chapek, ex consejero delegado de Disney, ha sido la última víctima del activismo inversor en Wall Street. Y no será la única en los próximos meses. De hecho, la corrección en Bolsa de los últimos meses hace temer una oleada sin precedente­s de campañas instigadas por los accionista­s para obligar a hacer cambios en el seno de las grandes multinacio­nales.

Además, esta inusual actividad podría verse reforzada por varios cambios en la normativa sobre voto delegado en Estados Unidos que entraron en vigor en septiembre y que podrían dar mucho más poder a los activistas a la hora de sentar representa­ntes en los consejos de administra­ción.

El regulador ha exigido a las compañías que la votación para elegir a los miembros del máximo órgano de gestión se realice a través de una papeleta única donde figure el nombre de todos los candidatos, independie­ntemente de quién los haya propuesto. Hasta ahora, esa votación se hacía a través de documentos diferentes, en los que la compañía enviaba la informació­n de sus propios candidatos en una especie de candidatur­a única.

Hasta ahora, si algún accionista quería hacer su propia propuesta, era libre de hacerlo y buscar el apoyo de otros inversores, pero asumiendo los gastos de su propia campaña. Se trata de un coste que puede llegar a superar con facilidad los 100.000 euros sólo por imprimir, enviar y recopilar las papeletas de voto. El presupuest­o se dispara en caso de querer alinear a otros accionista­s en una campaña que exija un cambio estratégic­o mayor.

A partir de ahora, sin embargo, esta barrera desaparece, lo que ha disparado las consultas de grandes multinacio­nales de Wall Street a sus asesores legales sobre planes de actuación y respuesta ante la oleada de campañas activistas que esperan. Con el nuevo sistema de votación, las posibilida­des de conseguir al menos un representa­nte en el consejo de administra­ción aumentan exponencia­lmente al tratarse de listas abiertas.

Y estamos en época de campañas. Al menos, de los primeros anuncios. Tradiciona­lmente, las juntas de accionista­s se celebran en primavera, pero antes de llegar a ese momento hay meses previos de preparació­n, que incluyen contactar con la propia compañía para hablar de la ‘precampaña’.

Normalment­e, estas conversaci­ones iniciales se realizan por estas fechas y se prolongan durante todo el invierno, en un intento de que el consejo de administra­ción se atenga a las demandas de los fondos activistas. De no llegar a ningún acuerdo, es cuando se pone en marcha tácticas más coercitiva­s que a veces terminan en auténticas batallas en la junta anual. Y, en esos casos, con un porcentaje bastante elevado de CEO que terminan en la calle tras una moción de censura por parte de los socios.

Nuevos jugadores

Además, confluye otro fenómeno, relacionad­o con una nueva generación de activistas, con participac­iones minoritari­as, pero mucho más beligerant­es. Muchos de estos fondos son casi boutiques lideradas por antiguos gestores de Elliott Management, pionero en el mundo del activismo en Wall Street y una de las firmas más temidas por los consejos de administra­ción de las grandes empresas.

Pese a no contar con muchos derechos de voto, esta nueva generación consigue un amplio apoyo entre las bases de los accionista­s a través de la promoción de las grandes causas relacionad­as con el medio ambiente, el buen gobierno corporativ­o y el impacto social de la actividad de la compañía. El espejo en el que todos se miran es Engine Nº1, que el año pasado se enfrentó al gigante de los hidrocarbu­ros ExxonMobil.

Pese a que la petrolera es una de las diez mayores compañías del mundo por capitaliza­ción bursátil y que el fondo apenas poseía un 0,02% del capital, Engine logró hacerse con tres sillones del consejo de administra­ción –y eso que no había entrado en vigor todavía la nueva normativa para elegir a los vocales–. Lo único que tuvo que hacer para convencer al resto de los accionista­s minoritari­os fue armar una campaña a favor de un cambio estratégic­o enfocado a las energías verdes, lejos del crudo.

A partir de ahí, el listado de compañías que se han enfrentado al activismo, en muchos casos de pequeños fondos desconocid­os, no ha dejado de crecer. Desde Chevron, hasta Hasbro, pasando por Disney. Y, en los últimos días, firmas como Meta (Facebook) o Alphabet (Google) tampoco están a salvo del descontent­o de sus inversores, que en lo que va de año han visto cómo en la Bolsa de Nueva York sus inversione­s han perdido cerca de 36.000 millones de euros.

 ?? ?? NEWS CORPORATIO­N El multimillo­nario Rupert Murdoch planea volver a unir News Corporatio­n
(medios impresos) y Fox (televisión y entretenim­iento). Sin embargo, la operación se ha encontrado con un obstáculo: Irenic Capital, que controla el 2% de News Corp., lidera una campaña contra la integració­n porque cree que beneficia a Murdoch, pero no al resto de accionista­s.
NEWS CORPORATIO­N El multimillo­nario Rupert Murdoch planea volver a unir News Corporatio­n (medios impresos) y Fox (televisión y entretenim­iento). Sin embargo, la operación se ha encontrado con un obstáculo: Irenic Capital, que controla el 2% de News Corp., lidera una campaña contra la integració­n porque cree que beneficia a Murdoch, pero no al resto de accionista­s.
 ?? ?? META (FACEBOOK) “Es hora de ponerse en forma” y olvidarse un poco del metaverso para centrarse en volver a la senda del crecimient­o. A finales de octubre, el consejo de Meta recibió una carta firmada por Brad Gerstner, fundador de Altimeter Capital, en nombre de los inversores de la compañía, que en los últimos 18 meses ha perdido más de la mitad de su valor en Bolsa.
META (FACEBOOK) “Es hora de ponerse en forma” y olvidarse un poco del metaverso para centrarse en volver a la senda del crecimient­o. A finales de octubre, el consejo de Meta recibió una carta firmada por Brad Gerstner, fundador de Altimeter Capital, en nombre de los inversores de la compañía, que en los últimos 18 meses ha perdido más de la mitad de su valor en Bolsa.
 ?? ?? ALPHABET (GOOGLE) Hasta 10.000 empleos podría costarle al grupo tecnológic­o la propuesta de Christophe­r Hohn, el inversor activista del fondo TCI, que ha exigido a la compañía hace unos días que recorte gastos, empezando por reducir la plantilla, en línea con los movimiento­s que ya han iniciado otras empresas del sector para garantizar las cuentas del últimos trimestre.
ALPHABET (GOOGLE) Hasta 10.000 empleos podría costarle al grupo tecnológic­o la propuesta de Christophe­r Hohn, el inversor activista del fondo TCI, que ha exigido a la compañía hace unos días que recorte gastos, empezando por reducir la plantilla, en línea con los movimiento­s que ya han iniciado otras empresas del sector para garantizar las cuentas del últimos trimestre.
 ?? ?? DISNEY Los activistas llevan llamando a su puerta desde el verano. Strive, liderado por Vivek Ramaswamy, lleva meses exigiendo a Disney que no opine de temas políticos y se centre en los negocios; al mismo tiempo, Third One, brazo inversor del millonario Daniel Loeb, le exigía cambios en el consejo, que se han saldado con la destitució­n hace unos días de su consejero delegado, Bob Chapek.
DISNEY Los activistas llevan llamando a su puerta desde el verano. Strive, liderado por Vivek Ramaswamy, lleva meses exigiendo a Disney que no opine de temas políticos y se centre en los negocios; al mismo tiempo, Third One, brazo inversor del millonario Daniel Loeb, le exigía cambios en el consejo, que se han saldado con la destitució­n hace unos días de su consejero delegado, Bob Chapek.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain