El nuevo ‘prêt-à-porter’ de los chefs
APERTURAS Los cocineros aprovechan el verano para estrenar conceptos ‘casual’ o ensayar nuevos modelos.
Nastura, plaza con multioferta
Muka, la brasa de IXO Grupo
Parrilla, cocina tradicional actualizada, ofertas playeras, burgers, menús en emplazamientos especiales y espacios temporales o pop-up. Son algunas de las fórmulas que unos cuantos cocineros han ideado esta temporada de verano para estrenar nuevos restaurantes o conceptos para comer de manera más o menos casual e, incluso a la vez, ensayar modelos para abordar otros futuros proyectos.
Así, parece que los cocineros aprovechan el verano para lanzar nuevas segundas marcas, que materializan una versión prêt-à-porter de su cocina. Con precios que permiten comer desde unos 10-12 euros y que pueden llegar incluso al formato del menú degustación por unos 50-60 euros (o más en el caso de comedores veraniegos que solo abren unos días), el aficionado a la gastronomía encuentra
Nacho Manzano
en estas novedades potenciales planes veraniegos.
Esta especie de serie B de la alta cocina se beneficia de los conocimientos y el know how de los chefs para dar pie a modelos de restaurante que en unos casos son permanentes, como Muka, de Andoni Luis Aduriz e IXO Grupo, o Nastura, de Nacho Manzano y su familia; y, en otros, son temporales, como la hamburguesería de Pepe Solla en un club de música ubicado en una playa pontevedresa.
Aparte de los ocho ejemplos explicados en la información adjunta, se podrían añadir otras novedades como los nuevos restaurantes de Dani García abiertos este verano (como el italiano Alelí), la sede ibicenca de la saga Sandoval (Asal) o los restaurantes pop-up de Diego Guerrero y Paco Roncero dentro del festival Lazareto, en Menorca.
Nacho Manzano y su familia, con dos estrellas Michelin en Casa Marcial (Arriondas), han estrenado este verano Nastura, en un espacio de 2.000 metros cuadrados en la antigua estación de tren de Oviedo. Se trata de un ‘multiespacio’ planteado como una ‘plaza’ con cabida “para todos los planes y momentos del día”, desde el vermú en una barra, el picoteo en el bar, comprar productos asturianos en la tienda, sentarse en las mesas altas asomadas a la cocina o en el comedor inspirado en un restaurante de antiguos vagones de tren o disfrutar de una copa en las mesas con vistas a la ciudad. Es decir, muchas opciones para comer de manera bastante ‘casual’ a diferentes precios. En otoño, se completará con un restaurante gastronómico. Por otro lado, los Manzano, artífices de la casa moderna de comidas Gloria, han impulsado este año Narbasu, que suma hotel y restaurante bajo un proyecto circular que ha incorporado huerta.