Maresmar facturará 170 millones y crece en el delta del Ebro
Maresmar, una de las principales compañías del pescado de España, ha llegado a un acuerdo con la Federación de Productores de Moluscos del Delta del Ebro (Fepromodel) para adquirir el producto de mayor calidad y crear una nueva marca, a modo de denominación de origen, con el objetivo de impulsar el reconocimiento de este producto.
El acuerdo, inicialmente, de unos 80.000 kilos anuales, podría llegar en los próximos años hasta los 300.000 kilos, de manera que cubriría aproximadamente el 10% de la producción de esa zona del sur de Tarragona.
“Nos cederán una parte de la producción de mejillón de mayor calidad y nosotros potenciaremos el territorio y ese alimento; queremos hacer algo parecido con lo que ha conseguido el Priorato [comarca de Tarragona] con el vino”, expone Pablo Garriga, propietario de Maresmar, que, además, ha adquirido una batea en la zona.
El gerente de Fepromodel, Gerardo Bonet, explicó ayer la importancia para su sector de contar con empresas intermediarias potentes para distribuir toda la producción a tiempo –la campaña va de abril a agosto–, antes de que el molusco deje de ser válido para su venta.
La compañía tiene su sede en Mercabarna, donde el pasado diciembre culminó una inversión de dos millones para ampliar y mejorar sus instalaciones, de 7.000 metros cuadrados.
Un 10% más
Maresmar está embarcada en un plan de crecimiento endógeno y mediante compras. La empresa prevé facturar este ejercicio 170 millones de euros, aproximadamente un 10% más que en 2021; sus exportaciones están por encima del 5% y sus clientes van desde la gran distribución a las pescaderías, pasando por el canal de hoteles, restaurantes y cafeterías (Horeca).
La compañía, con unos 200 empleados, ha entrado también en el segmento de los platos elaborados listos para comer con la marca El Chef de la Mar. Los moluscos del delta del Ebro generan un negocio anual de nueve millones de euros y de ellos dependen 1.200 empleos.