Relocalizaciones industriales para la soberanía energética

Sobre estos tres últimos países, recordó que está pendiente la ratificación de varios acuerdos comerciales, un proceso que se comprometió a acelerar. Por el contrario, no citó el acuerdo de asociación con el Mercosur, que también deben convalidarse, aunque en este caso, Francia y otros países han expresado sus reservas.

● Frenar las injerencias externas. Ante el auge de los autoritarismos, Von der Leyen defendió el parlamentarismo y el pluralismo. Presentará un “pacto para la defensa de la democracia” que planteará mecanismos para poner fin a las injerencias extranjeras “veladas” y también a su financiación “opaca”. Su objetivo es estrechar el cerco a mecanismos de poder blando, y puso un ejemplo: este verano, las autoridades neerlandesas cerraron un centro de derechos humanos adscrito a la Universidad Libre de Ámsterdam. Contaba con financiación china, y uno de sus académicos llegó a decir que los campos de internamiento para la minoría uigur eran “mentiras de los medios occidentales”. “No vamos a permitir que ningún caballo de Troya ataque nuestra democracia”, concluyó.

● Finanzas públicas. Los fondos europeos deben contribuir a acelerar la transformación de la economía europea y, de forma paralela, “habrá que otorgar más flexibilidad a los estados miembros para la reducción de la deuda”, destacó.

● Cerco a la morosidad. Von der Leyen también se refirió a la situación de las pymes. “Es inconcebible ver que el 25% de las bancarrotas se deben a que no se pagan las facturas a tiempo”, lamentó. Para poner fin a esta situación, se pondrá en marcha un “paquete de alivio” para este tipo de sociedades y además, se revisará la directiva sobre morosidad, para evitar que las compañías caigan por “pagos que llegan tarde”. Quiere también “un conjunto único de normas fiscales”.

● Anticorrupción. Las últimas ampliaciones de la UE tuvieron lugar en 2007 –cuando se incorporaron Bulgaria y Rumanía– y en 2013 –cuando entró Croacia–. El proceso entonces encalló, pero la política expansionista del Kremlin ha obligado a la UE a mover ficha. Von der Leyen defendió ayer el ingreso de “Ucrania, Moldavia, Georgia y los Balcanes Occidentales”, países en los que la corrupción sigue siendo una lacra. Sobre este aspecto, señaló que los países de la UE deben ser ejemplares, y exigir lo mismo que a los candidatos.