Así ha aumentado la partida de las prestaciones los últimos años
El gasto en pensiones no ha dejado de crecer en los últimos años. Al inicio de la década, en 2010, la partida suponía 108.200 millones de euros, lejos de los 171.100 millones que supondrá este año. La nómina mensual de las prestaciones contributivas de la Seguridad Social a 1 de septiembre ascendió a 10.867 millones de euros, nuevo máximo, y creció un 4,5% respecto a septiembre de 2021. Según los datos difundidos por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, este gasto supone el 11,8% del PIB, por debajo del 12,1% que supuso en agosto de 2021. Tres cuartas partes de la nómina de pensiones contributivas se destinó a pensiones de jubilación, en concreto, el 72,4%, es decir, 7.871,5 millones de euros. A pensiones de viudedad se dedicaron 1.833,3 millones, mientras que la nómina de las prestaciones por incapacidad permanente supuso 983,3 millones, la de orfandad costó 150,5 millones y a las prestaciones en favor de familiares se destinaron 28,5 millones. De las 9.949.869 pensiones contributivas abonadas, un 0,8% más que en el mismo mes del año anterior, 6.262.298 fueron de jubilación, 2.349.822 de viudedad, 950.209 de incapacidad permanente, 343.041 de orfandad y 44.499 en favor de familiares. La pensión media del sistema, que comprende las distintas clases de pensión (jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y en favor de familiares), se situó en 1.092,18 euros mensuales, con un aumento en el último año del 5,4%. La pensión media de jubilación del sistema alcanzó los 1.257 euros. Según los cálculos del Ministerio de Hacienda, estas prestaciones supondrán 39,2 euros de cada 100 euros de gasto de los presupuestos consolidados para el año 2023.