El AVE a La Meca de Renfe dispara el tráfico y alcanza al Madrid-Barcelona
El operador español logra en noviembre los 425.000 viajeros en el ‘AVE del Desierto’ y finalizará el año con 3,5 millones. La previsión apunta a cinco millones de pasajeros en 2023.
El tren entre Medina y La Meca (Arabia Saudí), el mayor activo de Renfe en el exterior, ha cogido velocidad de crucero después de que las autoridades saudís levantasen las restricciones sanitarias impuestas por el Covid.
Desde marzo, el tráfico de pasajeros no ha parado de crecer hasta alcanzar en noviembre la cifra récord de 425.000 viajeros transportados. Se trata de una demanda inédita que pone de relieve el peso que ha ganado el ferrocarril en Arabia Saudí desde la inauguración del corredor construido y mantenido por el consorcio español en el que, además de Renfe, participan Adif, Ineco, Cobra, OHLA, Indra, Consultrans, Copasa, Siemens, Imathia, Abengoa y Talgo.
Según las estimaciones realizadas por el operador estatal español, el AVE del desierto alcanzará este año 3,5 millones de pasajeros y disparará la demanda un 42% el año que viene, hasta alcanzar cinco millones de pasajeros transportados. Con estas magnitudes, el corredor saudí se convertirá en la línea más importante del grupo en términos de demanda, a la altura del AVE Madrid–Barcelona, el más ocupado y rentable de Renfe.
En 2019, último año completo antes del Covid, Renfe transportó en el AVE MadridBarcelona a 4,5 millones de pasajeros. Con la liberalización del largo recorrido en 2021 y la entrada en servicio del bajo coste Avlo, Renfe ha conseguido estimular aún más la demanda en su corredor estrella, hasta elevar la cifra de pasajeros a 6,3 millones.
Los trenes del consorcio Al Shoula, que cuentan con 417 plazas cada uno, realizan hasta 70 servicios diarios (35 por sentido). En concreto, hay 15 circulaciones por sentido entre La Meca-Medina; La Meca-Aeropuerto de Yeda (13 trenes por sentido), y MedinaAeropuerto de Yeda (7 trenes por sentido) incluyendo adicionalmente, trenes dobles (casi mil plazas) acoplados con
El AVE a Barcelona logró 4,5 millones de viajeros en 2019. El Meca-Medina prevé 5 millones en 2023
Renfe, que explotará el corredor 12 años, necesita más tráfico para rentabilizar el contrato
el objetivo de aumentar la capacidad. Durante el protocolo Covid las autoridades saudís limitaron el número de plazas a 260 viajeros por tren. Renfe firmó por siete años la explotación del corredor, plazo ampliable a 12 años.
El crecimiento exponencial del tráfico en Arabia representa un alivio para el grupo español, ya que el operador estatal parte en ese mercado con un importante déficit de explotación en relación a la demanda prevista cuando le adjudicaron el contrato, en 2012. Cuando se firmó el contrato del AVE a La Meca se fijaron unas previsiones de tráfico equivalentes a 80 millones de pasajeros al año gracias al teórico flujo de peregrinos. En España, Renfe mueve en alta velocidad a unos 22 millones de pasajeros al año.
Renfe contempló en Arabia unos ingresos de unos 1.400 millones de euros. De esta suma, la empresa presidida por Isaías Táboas solo tiene garantizado por contrato 600 millones y el resto son, en principio, ingresos variables en función de la evolución de la demanda y de la aprobación de un bonus sobre la política tarifaria.
Según los técnicos del proyecto, este bonus está condicionado al establecimiento previo de una tarifa general. Con autorización de la SRO, Renfe podrá encarecer los billetes business. En la clase turista, el alza podría ser del 5%.
Poco después de ponerse a trabajar en el corredor, se descubrió un error en el cálculo de la demanda y se bajó a 60 millones de pasajeros al año. Pero el consorcio Al Shoula realizó estudios de sensibilidad de la demanda antes de la pandemia que, incluso, reducían al 5% el tráfico de pasajeros sobre la previsión inicial, lo que arrojaría un déficit de explotación para la compañía española de unos 450 millones.
Debido a esta circunstancia, la compañía ferroviaria, además de contratar a una consultora para estimar tráficos más realistas, emprendió una negociación con SRO con el fin de compensar esa pérdida de explotación latente. El Covid, junto con la reconstrucción de la estación de Jeedah, ha facilitado esas conversaciones.