Celtarys Research, Usc-biofarma y Zeclinics buscan nuevas dianas terapéuticas frente al párkinson y candidatos a fármacos que puedan modularlas
Este proyecto, coordinado por Asebio, aúna las capacidades de validación de dianas y cribado de fármacos in vivo de Zeclinics, el conocimiento científico en diseño y síntesis de herramientas fluorescentes de Celtarys Research y las capacidades de desarrollo de ensayos de cribado in vitro de alto rendimiento de Usc-biofarma.
La enfermedad de Parkinson (EP) representa la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente en los países industrializados tras la enfermedad de Alzheimer. Según datos de la Sociedad Española de Neurología, más de siete millones de personas padecen párkinson en todo el mundo. En el caso de España se detectan cada año aproximadamente 10.000 nuevos casos, con una cifra total de personas que supera las 150.000 personas. Nos encontramos ante un creciente problema de salud pública tal y como ha señalado la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya que su prevalencia se ha duplicado a nivel global en los últimos 25 años. La OMS ha alertado de que la discapacidad y la mortalidad por la enfermedad de Parkinson están aumentando a una velocidad mucho mayor que cualquier otra enfermedad neurológica.
Hablamos de una enfermedad que, en sus inicios, suele
pasar desapercibida ya que su manifestación consiste en
síntomas prodrómicos que incluyen depresión, problemas relacionados con el sueño, déficits cognitivos, disfunción olfativa, estreñimiento y otros síntomas relacionados con el sistema nervioso autónomo. A medida que la enfermedad progresa, los pacientes experimentan síntomas motores más específicos que conducen al diagnóstico definitivo:
movimientos involuntarios o incontrolables, temblores, rigidez y dificultad con el equilibrio y la coordinación. Se trata de un trastorno complejo que requiere un gran conocimiento tanto en la fase diagnóstica (para realizar una correcta y precoz identificación de síntomas, llevar a cabo el diagnóstico diferencial y solicitar los estudios complementarios necesarios) como en la fase de tratamiento (para decidir el momento de inicio y el tratamiento y plantear a lo largo de la evolución diferentes terapias con un fin de aliviar los síntomas).
El párkinson es una enfermedad extremadamente invalidante que tiene un impacto negativo en la vida cotidiana de las personas afectadas y de sus familias. Hasta la fecha, a pesar del gran esfuerzo realizado por la comunidad científica, no existe una cura y sólo disponemos de fármacos destinados a aliviar los síntomas una vez se ha producido el diagnóstico, como la levodopa y la carbidopa (consideradas los fármacos de primera línea para el tratamiento de los síntomas motores del párkinson). Una situación que plantea importantes desafíos en el contexto de la salud publica ya que, tal y como se ha señalado, se prevé que su prevalencia aumente en los próximos años a medida que la esperanza de vida también lo haga, por lo que es probable que en los próximos años el sistema sanitario tenga que hacer frente a una carga económica del orden de miles de millones de euros para enfrentarse a esta enfermedad.
Tres compañías biotecnológicas aúnan sus capacidades en busca de dianas terapéuticas
En este contexto, la biotecnología trabaja con el objetivo de encontrar soluciones que permitan atajar el problema