ASÍ LA VEMOS
Personalmente creo que la gran experiencia de los responsables de Avon tiene algo que ver en la increíblemente buena manejabilidad de la Bobber Black. Por ejemplo, una Moto Guzzi V7 Bobber dispone de la misma medida delante, pero con neumático Continental, y en la italiana no eres capaz de saber exactamente qué hace el neumático frontal porque no transmiten nada de información al piloto. En la británica también suma el buen reglaje de la horquilla Showa, lo que te da mucha confianza en el agarre delantero en curvas. En este caso no ha sido cuestión de premiar el estilo sobre el comportamiento, sino de un gran trabajo de puesta a punto. Estos Avon ofrecen mucha confianza, excelente agarre y una conducción relajada, pero dejan en evidencia la distancia libre al suelo de las estriberas, porque acabarás llevándola como si fuera una deportiva.
En su motor, habría bastado con una caja de cuatro. Puedes abrir en sexta a tope desde solo 2.300 rpm que responderá sin la más mínima queja de transmisión. Mejor hacer cambios rápidos y cortos hasta llegar a sexta y rodar como si estuvieras surfeando.
Su distancia entre ejes y el bajo centro de gravedad también permite pilotar con naturalidad en zonas bacheadas, pero lo más sorprendente es lo bien que se maneja en curvas cerradas de carreteras o en las esquinas de la ciudad. ¡ Parece increíble que tenga un neumático anterior tan ancho!
CON PASAJERO
Es una moto monoplaza, sin opción de asiento trasero en su paquete de opciones. Individualismo en estado puro.