CRECE LA IMPORTANCIA DEL PAPEL JUNTO A LA INFORMACIÓN DIGITAL
Nuestras revistas y catálogos se han hecho imprescindibles gracias al trabajo de profesionales de gran clase en el Motor
El complejo mundo de la información actual e histórica, hoy perfeccionado por la inmediatez de Internet y sus redes de contacto gratuitas, ha reducido la necesidad de dar noticias a través del papel. Un fenómeno anticipado por las emisoras de Radio y Televisión y multiplicado por la telefonía de bolsillo.
Naturalmente, los tradicionales medios impresos también evolucionan gracias al apoyo de las nuevas tecnologías y a la perfección en el detalle ofrecida por redactores especializados, de reconocida calidad y conocimientos técnicos: auténticos protagonistas de la información y habituales en publicaciones como las nuestras.
En mi caso, como veterano editor, iniciador afortunado de las revistas del Motor en España, contar con profesionales especialmente cualificados siempre fue, y sigue
siendo, motivo de máxima satisfacción y orgullo profesional, tanto en publicaciones en papel como "online" – con información incluso en el momento mismo de producirse la noticia– y en combinación de ambos soportes, pues desde nuestras páginas también puede accederse a contenidos en vídeo sobre comportamiento de automóviles, visualizables a través del móvil.
Aprovecho el tema de esta carta editorial para recordar nuestros comienzos en la información prácticamente con idéntico valor digital cuando este avance de la comunicación aún no existía.
Hace sesenta y tres años se me ocurrió orientar a mis lectores del diario "Pueblo" y de otros medios –receptores de las noticias de mi agencia informativa "Motor Press"– sobre qué vehículo sería conveniente a sus necesidades y economía. Debían remitirnos por correo la relación de sus gustos, necesidades y presupuestos, así como un gran sobre franqueado y con su dirección.
Previamente instalé en nuestra redacción de la calle Isaac Peral, de Madrid, un mueble lleno de pequeños compartimentos para depositar folletos de todos los modelos de coches motos y furgonetas entonces a la venta.
Frente al mueble, Romualdo Garrido leía las cartas recibidas y metía los folletos adecuados, según su criterio, en el sobre franqueado. ¡Trabajo totalmente digital! Nuestra "clientela" llegó a alcanzar las trescientas consultas semanales.
Algunas marcas nos solicitaron la dirección de sus posibles clientes, lo cual nos sirvió como contacto de amistad, y los periódicos, además, se vieron favorecidos con publicidad.
En el periodismo del Motor nunca nos faltó la imaginación y un buen humor siempre útil y necesario.