LO QUE TE PUEDE COSTAR HACER RUIDO
ES POSIBLE QUE SE TE ROMPA O SUELTE EL ESCAPE. PUEDE QUE LLEVES UN MODELO QUE NO ESTÉ HOMOLOGADO O SIN EL FAMOSO “DB-KILLER”. O PUEDE, SIMPLEMENTE, QUE TE GUSTE QUE TU MOTO SUENE MÁS QUE DE SERIE. TODO ELLO VA EN CONTRA DE LO LEGAL Y TE SALDRÁ CARO.
También es una cuestión de solidaridad con los demás: es posible que a ti si te guste ese ruido de más, pero ten por seguro que a las personas que viven en zonas cercanas a las vías con más nivel sonoro de la ciudad seguramente no les hace ninguna gracia. Por eso se denomina a estos problemas “contaminación acústica”, algo que en ciudades grandes como Madrid llega a ser muy grave y a afectar a la salud de muchas personas.
Por desgracia para nosotros, la moto ha sido una de las fuentes más comunes de esa contaminación. No somos los únicos, porque autobuses, sirenas, camiones (como los de la basura) son también responsables de esa contaminación, además del tráfico rodado habitual. Los ayuntamientos, como es lógico, intentan luchar contra ello y lo hacen con los medios que tienen a su disposición. En este sentido, el Ayuntamiento de Madrid fue pionero en España y es el único que mantiene ahora mismo un centro de control de acústica donde, entre otras funciones, controlan el ruido de las motos que la policía municipal detecta en la calle con un nivel sonoro superior al normal.
EL CENTRO MUNICIPAL DE ACÚSTICA En estas instalaciones nos reciben Víctor Aparicio, Jefe de División, y César Torres, Jefe de Sección, parte del equipo de dirección de este centro, nuestros anfitriones e impulsores de esta visita. De ellos ha partido la iniciativa de realizar este reportaje, ya que ellos ven día a día mucha gente mal informada que se encuentra con una multa importante por simple desconocimiento de lo que les puede ocurrir por ir con la moto en mal estado en este sentido. Nos han invitado con toda la intención de dar publicidad a este asunto y, en la medida de lo posible, que estemos todos mejor informados del problema que el ruido supone y del problema económico importante que te puede suponer a ti.
Su trabajo se basa en las normas europeas y de homologación que deben conocer tan bien como los fabricantes. En el caso que nos ocupa es básicamente lo que
Hay un protocolo específico para verificar si tu moto es legal o no
nosotros conocemos, a grandes rasgos, como normas Euro 2, 3 o 4. Las motos, en función de qué homologación Euro tengan, se miden de una forma u otra, con la complicación añadida de que dentro de cada una de estas puede haber habido modificaciones que han entrado en vigor después de la norma general. Lógicamente ellos deben conocer también la normativa referente a camiones, coches, aparatos y demás “productores de ruido” del tráfico. Como anécdota cabe destacar que nos cuentan que, además de los escapes abiertos de algunas motos, son los neumáticos de autobuses y camiones otra de las grandes fuentes de ruido y un aspecto que deben controlar habitualmente.
Al fondo de la instalación se encuentra el propio laboratorio de control de ruidos a
pie de una de las pistas de pruebas. Los diferentes micros y sistemas de recogida de las pruebas van a un ordenador en esta sala, la verdadera “cocina” del Centro. También, a su lado, encontramos una cámara anecoica, sala absolutamente insonorizada, con el suelo “suspendido” para que no transmita vibraciones y completamente forrada de fibra con formas en pico que absorben completamente los sonidos que se produzcan dentro. Sirve para homologar todo tipo de aparatos e incluso puede ser usada por empresas privadas que quieran hacer pruebas. LA PRUEBA DEL RUIDO DE LA MOTO Vas por la calle, como todos los días. De repente un policía municipal te para y te dice que tu moto hace más ruido del que debe y que tiene que ser comprobada. Puede ser que lo sepas y lleves un escape no homologado, con el “DB-killer” quitado, simplemente roto o con la fibra del silenciador quemada. Te entregarán un boletín para que vayas al Centro Municipal de Acústica y harán fotos del sistema de escape que llevas montado. No vale hacer trampas y salir corriendo a casa a cambiar el escape por el de serie. Tienes, desde entonces, 15 días para hacer la prueba. Como era de esperar, se encuentran en el centro con gente que ha llenado el escape con lana de acero o con las cosas más peregrinas para evitar que la prueba salga desfavorable, pero como verás, no es fácil engañar al sistema.
Llegas al centro, entregas el boletín y, en función de la homologación de tu moto, se comprobará que el sonido que emites sea el que corresponde a esa norma. Hay varios márgenes de permisividad: al resultado de la prueba se le resta un
decibelio a favor tuyo. Además, a la medida homologada se le suman 4dB más de margen. Asimismo, como hemos comprobado, las marcas suelen homologar un ruido superior al que realmente hace la moto. De este modo tienes mucho margen. Nosotros hemos pasado esta prueba de la misma forma que se hace cuando te paran y para ello hemos ido al Centro con una BMW R nineT Urban GS con escape de serie. Y hemos aprobado con holgura.
PRUEBA ESTÁTICA
La BMW R nineT Urban GS es, por supuesto, Euro 4. De todas las pruebas que el Centro Municipal de Acústica puede hacer tenemos que pasar dos: prueba de ruido en parado y prueba dinámica. Esta segunda es la más importante, la más difícil de pasar si llevas algo “tocado”, y la más real de cara a lo que oyen
los demás cuando circulas. Al ser Euro 4, la moto especifica en la propia placa de homologación las condiciones en las que se debe pasar la prueba. No solo dice el nivel de dB y a cuántas revoluciones, sino que también indica las condiciones de la prueba dinámica. A fin de cuentas, son datos de la homologación.
En otros casos, en motos más antiguas, estos datos no figuran en la chapa que va en la moto. Necesitarán la documentación de la moto para identificar exactamente el tipo de moto que es (no vale aquello de “es una CBR del 2004”), puesto que depende de para qué mercado y en qué año se fabricó, bajo qué normas de homologación y todos esos detalles que vienen especificados en la ficha técnica. Antes esto era algo más complicado; ahora, de un tiempo a esta parte, pueden consultar las fichas reducidas de homologación de todos los vehículos homologados en nuestro país, puesto que esa base de datos del Ministerio de Industria se ha hecho pública. Tú también puedes acceder a ella y consultar esa misma ficha reducida de tu moto en https://sedeaplicaciones.
Nuestra BMW R nineT Urban GS pasa con eficiencia todos los controles
minetur. gob. es/ giaveh/ FR/ Extranet/ ConsultaFichasReducidas.aspx. Eso sí, búscala con el código de homologación, porque por modelos “normales” no lo encontrarás. Es útil y te da mucha información sobre tu moto.
Por la homologación Euro 4, la BMW deberá pasar primero la prueba en parado. Se lleva a la pista circular, una zona despejada y abierta con el ruido ambiental controlado. Allí miden también el ruido de maquinaria o de los camiones de basura y sus sistemas neumáticos, con una serie de micrófonos que recogen todo el sonido alrededor. En el caso de la moto es mucho más simple y la prueba es muy similar a la de las ITV. Con el micrófono a la distancia del escape que marca la ley miden el resultado a las revoluciones que indica la homologación. Con la Urban GS hay un problema añadido: no tiene cuentavueltas. En las ITV, en estos casos, te ponen medidores que captan del encendido o de las vibraciones del motor y calculan las vueltas. Aquí el sistema es más sofisticado y moderno, y calcula, del propio sonido, las rpm del motor. Esta prueba, a moto parada, la hace el personal del centro, hablando por radio con el controlador de la prueba que le va indicando las
rpm alcanzadas y leídas en el ordenador que recoge el resultado. La BMW aprueba de sobra, dando 86dB a 3.875 rpm, de un máximo de 90+4dB.
PRUEBA DINÁMICA
La segunda parte es la prueba dinámica en una pista recta donde hay una zona con micros, radares y unas líneas en el suelo. Tienes que pisar la primera línea transversal que delimita la zona de medición a la velocidad y en la marcha que la ficha de homologación indica. En el caso de la BMW es 39 km/h en 4ª. Una
Se permite un rango "de gracia" de 4 dB de más en tu favor
vez que has pisado esa línea, ruedas entre otras dos líneas paralelas unos 20 ó 25 metros abriendo gas a tope en esa marcha. Pasada la segunda línea transversal con la rueda trasera puedes frenar para repetir la prueba en dirección contraria. Se hace varias veces, buscando la mejor medición y, sobre todo, la aceleración que la ficha indica que debe alcanzarse, en esas condiciones, para evitar que el conductor, por ejemplo, no abra el acelerador a tope. Después se repite la prueba, a más velocidad. En este caso eres tú el que debe llevar la moto. Si no abres gas, si vas en otra marcha, en definitiva, si quieres “hacerte el listo”, te van a pillar. Si has llenado el escape de “nanas” después de que te pararan o has montado el dB killer cuando no lo llevabas, también, como es lógico. La BMW vuelve a cumplir de sobra y nos quedamos por debajo del límite con un amplio margen de más de 8dB, que como te decíamos antes, es mucho: ha alcanzado 73dB a 50 km/h, siendo el tope admitido de 77+4dB.
Según nos comentan, estos resultados son los normales para una moto de serie con el escape en buen estado. Los márgenes legales, más lo que ellos dejan en la edición, dan lugar a que si una moto tiene un escape homologado bien montado y mantenido no tendrás problemas. Los responsables del Centro Municipal de Acústica saben mucho de esto, no cabe duda. Y no, no están para complicarte la vida. Sinceramente intentan colaborar en lo posible para que salgas lo mejor parado posible, incluso aconsejándote o informando que el problema del ruido es avería (escape suelo o roto) y, por tanto, no es culpa tuya si así ha sido. Pero no intentes “saber más que nadie”: tienen mucha experiencia y saben perfectamente que cuando falta el dB-killer no siempre es culpa del mecánico, que se lo ha dejado sin poner...