Justin Kurzel pasa de adaptar ‘Macbeth’ a tomar las riendas de la versión de un videojuego millonario con un reparto con importante presencia española.
Cal Lynch
(Michael Fassbender) escapa del corredor de la muerte para caer en manos de Sofia Rikkin (Marion Cotillard), una científica que descubre su conexión con Aguilar, un miembro de la antigua Orden de los Asesinos que se enfrentó, en la España del siglo XV, con los Templarios para proteger una reliquia: el fruto del Edén.
LA HISTORIA:
Ya en su debut, la malsana Snowton (2011), el australiano Justin Kurzel (Gawler, Australia,
1974) demostró su buen ojo para captar la violencia interior de unos personajes a punto de estallar. Algo que llevó a las
últimas consecuencias con su segundo trabajo, Macbeth (2015), el Shakespeare más
sangriento de los últimos años. Una intensidad que el cineasta mantiene en
su tercer film, pero con un matiz. La violencia es mucho más fantástica, circunscrita a los límites genéricos del videojuego, asegura, pero, paradójicamente, por eso nos interesaba que se sintiera real, que se palpara. En la medida de lo posible, hemos evitado tanto como hemos podido los efectos digitales. Rodada en los estudios británicos Pinewood
y en escenarios naturales de Malta y Almería, Kurzel revela un sorprendente referente a la hora
de encontrar un estilo propio:
Se trata de Lawrence de Arabia (David Lean, 1962). Sus escenas de acción son extraordinarias por la autenticidad que transmiten. Espero que ese estilo, esa manera de rodar a la vieja escuela por la que hemos optado también nosotros, se vea en nuestro film.
LOS VILLANOS, ESPAÑOLES
Jeremy Irons, Michael K. Williams (visto en la serie The Wire y que en la cinta interpreta a Baptiste, un personaje clave en la saga de los videojuegos), Charlotte Rampling o la griega Ariane Labed, esposa del cineasta griego Yorgos Lanthimos, acompañan a Michael Fassbender y Marion Cotillard en un reparto internacional con una importante delegación española. Así, Carlos Bardem es Benedicto, uno de los mentores de los Asesinos, mientras que Javier Gutiérrez, que interpreta a Tomás de Torquemada, y Hovik Keuchkerian (en un agradecido
doble papel) se encargan de los villanos del film. Han sido parte clave para contar el origen de Cal y los Asesinos, cuenta Kurzel: Ahora queda por ver si podremos explicar cómo continúa su historia. El pasado está escrito, veremos qué depara el futuro.