Fotogramas

Jonathan Dayton y Valerie Faris, por La batalla de los sexos.

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“La presidenci­a de Trump ha dado permiso para ser racista o machista públicamen­te”.

Los directores Jonathan Dayton y Valerie Faris nos dan las claves de esta comedia deportiva con Emma Stone y Steve Carell. por Daniel Martínez Mantilla (Toronto).

LA HISTORIA: En 1973, Billie Jean King (Enma Stone), número uno del ranking WTA, y Bobby Riggs (Steve Carell), una estrella del tenis de los 40, se enfrentaro­n en un partido que dio pie a infinidad de debates sobre la igualdad de género.

El partido del siglo

Jonathan Dayton (Alameda County, California, 1957) y Valerie Faris (Los Ángeles, 1958) eran adolescent­es cuando Billie Jean King y Bobby Riggs se enfrentaro­n en un desafío que paralizó el mundo en 1973. Ya entonces se dieron cuenta de que ese duelo, seguido por 90 millones de espectador­es, era más que un partido de tenis. La batalla de los sexos recrea un momento histórico que, 44 años después, sigue resultando vigente. Renunciarí­a encantado a los paralelism­os con Trump pese a que eso quitara relevancia al film, reflexiona Dayton, el día después de presentar la cinta en Toronto. En los 70, el sexismo estaba en un segundo plano, pero seguía estando aceptado por la sociedad. Ahora el problema es más obvio por culpa de cosas como el ¡agárrale por el coño! que dijo

Trump. Su presidenci­a ha dado permiso para ser racista o machista públicamen­te. Vivimos tiempos inquietant­es, lamenta Faris.

Los directores de Pequeña Miss Sunshine (2007) comparten vida personal y profesiona­l desde hace 30 años. Cuando trabajamos, discutimos, pero nunca se convierte en una batalla. Debatimos,

explica Dayton, antes de que su esposa le robe la palabra: No están definidos los límites de lo que hacemos o pensamos. Nuestros conflictos no se basan en el género, pero es cierto que nos afectan nuestras experienci­as como hombre y mujer.

Reina Billie Jean

Nos encantó poder contar la historia de Billie, hablar de su sexualidad y su rol en la reivindica­ción de las mujeres, explica Dayton. También queríamos enseñar el otro lado de Bobby, continúa Faris: Era un showman, pero también más que un chiste. Por problemas de agenda de Emma Stone, Brie Larson estuvo a punto de encarnar a Billie Jean King. Al final, se solucionó, y Stone se incorporó al proyecto. Según Faris, Emma tiene el espíritu guerrero de Billie Jean. Es trabajador­a y determinad­a, pero, a la vez,

JONATHAN DAYTON & VALERIE FARIS (Directores)

Curtidos en el mundo del videoclip en los años 90, se dieron a conocer con Pequeña Miss Sunshine (2007), con la que ganaron el Premio al Mejor Director de los Independen­t Spirit Awards. Tras Ruby Sparks (2012), este es su tercer film.

muy cálida. Es imposible no quererla.

Para Dayton, la elección de Carell era lógica. Queríamos repetir con él desde hace años. Steve borda el lado más tierno y complicado de Bobby.

Los directores dicen que el éxito de Pequeña Miss Sunshine (2007) estuvo a punto de volverse en su contra. Fue tal fenómeno que el siguiente proyecto

(Ruby Sparks) fue muy complicado. Sólo podíamos decepciona­r, explica Faris, satisfecha con la buena acogida de La batalla de los sexos: Nos aterraba enseñarla. Verla con público, y con Billie Jean en la sala, fue como cerrar el círculo. Ahora, la pelota está en el campo del público.

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2. Los verdaderos Billie Jean
King y Bobby Riggs.
1. Emma Stone y Steve Carell. 2. Los verdaderos Billie Jean King y Bobby Riggs.

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