EL RINCÓN DEL ARTISTA
Si hay un punto de cita para todos los llegados a la ciudad del cine, ese es el célebre restaurante Brown Derby, escribíamos entonces sobre el local que dirigía de Bob Cobb, en donde colgaban los retratos a carbón de todas las celebridades del cinema, realizados por un pintor que el propietario dedica exclusivamente a esta tarea. El local, que continuó hasta que fue pasto de las llamas en 1987, aparece en un episodio de Te quiero, Lucy, donde Lucille Ball coincide con William Holden.