Diane Kruger: duelo y la venganza
El turco-alemán Fatih Akin convirtió a Diane Kruger en una mujer hundida en el dolor, que se transforma en un ángel vengador a su pesar, una interpretación que le valió el premio a la Mejor Actriz en el pasado Festival de Cannes. por Philipp Engel.
LA HISTORIA:
Katja (Diane Kruger) vive feliz con su marido (Numan Acar), un delincuente turco reformado, y el hijo de 6 años de ambos, Rocco (Rafael Santana), hasta que un mal día estalla una bomba que acaba con sus vidas.
El dolor más grande del mundo
No hay nada peor que perder a un hijo, y si encima, en la misma explosión, también fallece la (querida) pareja, redoble de horror. Para una persona es el abismo, pero para una actriz con ganas de demostrar lo que vale, como Diane Kruger, acaba siendo un regalo del Cielo, tal y como se demostró en el pasado Festival de Cannes, donde el Jurado que presidía Pedro Almodóvar le entregó el premio a la Mejor Actriz por este papel de madre muerta en vida.
Ella y Fatih Akin, el realizador internacionalmente reconocido por Contra la pared (2004), se conocieron, de hecho, en una fiesta del mismo Festival de Cannes, en 2012. Ella se le acercó, y se declaró fan; le confesó que había crecido con sus películas y le señaló que estaba más que dispuesta a trabajar con él, ansiosa por conseguir un papel en su lengua natal, ya que, desde que debutó en cine con The Piano Player (Jean-Pierre Roux, 2002), la ex modelo sólo se ha prodigado en producciones francesas o anglosajonas. La oportunidad no llegó hasta años después. Ella leyó el guion, y se entusiasmó. Quería el papel como fuera, recuerda Akin: Es una gran actriz que no le tiene miedo a nada, está dispuesta a intentarlo todo. Disfruta interpretando, incluso las escenas más dolorosas. Y de estas en En la sombra no hay pocas. Tras una breve introducción que muestra la felicidad conyugal, Diane Kruger no deja de sufrir ni un segundo. Se trata de un dolor insuperable, el más grande, que engrandece más si cabe la banda sonora de Josh Homme, de Queens of the Stone Age, una banda con temas que Akin califica de fatalistas. Su música es increíble, algo único, profundamente triste y maravilloso, sentencia el satisfecho cineasta, que acudió a Cannes con una vieja camiseta de la banda.
El ángel exterminador
Kruger aparece en todos los planos y no deja de sufrir. Pero, cuando se descubre la identidad de los asesinos, una pareja de terroristas neonazis tan rubios como ella que son detenidos y sometidos a un juicio injusto, descubrirá
“Diane Kruger es una gran actriz que no le tiene miedo a nada. Está dispuesta a intentarlo todo”. Fatih Akin, director.
en ella un inextinguible deseo de venganza. La tesis del ojo por ojo levantó ampollas en Europa asolada por una serie de atentados islamistas que se reinvidicaban precisamente como actos de venganza por lo sucedido en Siria o Irak. Pero la intención no era darle la vuelta a los acontecimientos, y situar al espectador en una posición incómoda. Según el turco- alemán, el origen del proyecto hay que buscarlo en los asesinatos de la banda Clandestinidad Nacionalsocialista (NSU): Entre 2000 y 2007, perpetraron una serie de asesinatos xenófobos por todo el territorio alemán. Fue algo muy impactante para mí, al ser de origen turco. Mi hermano conocía a una de las personas que murieron en Hamburgo. Pero lo más escándaloso es que l a policía centró sus investigaciones en la comunidad de las víctimas, y atribuyó los atentados a venganzas por asuntos de drogas o de juego. No podían aceptar que pudieran ser víctimas. Como eran turcos tenían que ser por fuerza traficantes de drogas, y los crímenes ajustes de cuentas o algo por el estilo. La policía ejerció tal presión que la prensa y la gente empezó a pensar lo mismo.
No cabe duda de que hacer esta película le ha brindado la oportunidad de
vengarse a él también de aquella injusticia: Está la justicia del estado y la justicia i ndividual, y, a veces, hay un conflicto entre las dos, reconoce. Esta película habla de ese conflicto, y ahí donde hay conflicto también hay un drama que merece ser contado. Los que se quedan
Para la actriz, el terrorismo es un tema de dolorosa actualidad. Cada día escuchamos noticias horrorosas. Cada día nos hablan de muertos, y de números de muertos. Pero nunca nos cuentan las historias de los que se quedan. Para mí, hacer este film fue una manera de tratar de responder a esta pregunta: ¿Cómo se puede soportar un dolor tan grande?
ESTRENO: 23 FEBRERO