Documental.
★★★★★
Maria by Callas (Francia, 2017, 113 min.). Dir.: Tom volf. DOCUMENTAL.
Obsesivo, apasionante (auto)retrato elaborado, al modo de Senna (2010) y Amy (2015), de Asif Kapadia, a partir del cuidadoso ensamblaje de valioso material de archivo (en parte inédito), Maria by Callas facilita una buena pista para su interpretación desde su mismo título: de lo que se trata aquí es de acceder a la mujer (Maria, aislada en el interior de su burbuja de excelencia, sobreexpuesta y cuestionada por los medios de comunicación, traicionada en los amores) a través del icono:
la Callas, la diva que vio sacrificada su infancia, la gran trágica, vector de autoexigencia que se granjeó una fama ¿injusta? de personalidad problemática.
Tom Volf le guiña el ojo al Franco Zeffirelli de Callas Forever (2002) al confiar la lectura de fragmentos de la correspondencia privada de la soprano a la voz de Fanny Ardant, y no pierde ocasión de convertir su generoso trabajo en, también, un Grandes Éxitos de una Callas que fue demasiado grande como para acomodarse a una mera vida mortal.
Todo un festín para devotos, capaz de seducir a profanos. ESTRENO: 11 MAYO
PARA INICIADOS Y POSTULANTES AL CULTO A MARIA CALLAS. Lo mejor: la riqueza y solidez del material. Lo peor: a veces, el montaje engaña: ¿vemos realmente el flechazo con Onassis?
La vida de Maria Callas, desde que nació en Nueva York, hija de emigrantes griegos, hasta su muerte en París, pasando por sus grandes éxitos y sus fracasos, amores y desamores.
Dos en una. Hace ya más de 40 años que Maria Callas (1923-1977) nos dejó, pero no nos la podemos quitar de la cabeza. En parte, por Master Class la obra teatral de Terrence McNally que la también soprano María Bayo protagoniza en los escenarios teatrales, y en parte por este monumental retrato, donde el novel Tom Volf nos descubre a la mujer que se escondía tras la diva. Ella misma se lo reconocía a David Frost en una entrevis- ta inédita hasta la fecha que sirve de hilo conductor para Maria by Callas: Hay dos personas en mí. Me gustaría ser Maria, pero también soy la Callas, y tengo que estar a la altura.
Toda una vida. Respetando un orden cronológico que ayuda a comprender la construcción del personaje, Tom Volf, al contrario que otros muchos documentalitas, también respeta sus arias más emblemáticas, dejando que suenen enteras, como metáforas musicales de los distintos períodos de su vida. Ella misma lo reconocía también: Si alguien me escucha, me encontrará en- tera en mis representaciones. Para reconstruir una trayectoria de poco más de medio siglo (murió a los 53 años, no se sabe si de infarto, o porque se mató) desde una perspectiva íntima, nunca vista, Volf ha recolectado una ingente cantidad de películas caseras entre sus allegados, además de rescatar una selección de sus cartas a Elvira de Hidalgo, profesora de Canto a la que consideraba como una madre. Y para leerlas, nadie más indicado que Fanny Ardant. La francesa había protagonizado la Master Class de McNally sobre los escenarios de París, dirigida por Roman Polanski, en los años 90, y también protagonizó Callas Forever (2002), bajo las órdenes de Franco Zeffirelli, que había sido ayudante de Luchino Visconti cuando este dirigió a Callas en La Scala de Milán. Un retrato íntimo y riguroso, en el que cobran importancia personajes como Pier Paolo Pasolini, que la dirigió en Medea (1969), o el multimillonario griego Aristoteles Onassis, que fue el gran amor de su vida. ESTRENO: 11 MAYO Maria by Callas (Francia, 2017, 113 min.). DOCUMENTAL.