BOND, MASTER OF CHAMPAGNE DEL CINE
Un icono del turismo y la gastronomía como la Guía Repsol se ha renovado para adaptarse a las nuevas tendencias. Una apuesta clara por lo local y lo auténtico, con nuevas formas de narrar, incluido el cine.
En su afán de mejorar y llegar hasta el viajante de hoy, en la Guía Repsol han utilizado los formatos que mejor conectan con su público: vídeos, fotografías, redes sociales y divertidos artículos como este. James Bond es quizás el personaje cinematográfico (Dry Martinis aparte) que más y mejor champagne ha bebido en toda su Historia. Algo que le ha convertido en un auténtico Master of Champagne por su gran precisión en la cata, y lo ha demostrado en muchas ocasiones a lo largo de sus 24 películas.
Un champagne te puede salvar la vida. Ya en su primera película, el agente 007 se dispone a golpear al Dr. No con una botella de espumoso, cuando este le advierte que sería una pena romper una botella de Dom Perignon 55, a lo que Bond le contesta que él prefiere el 53 (considerada la mejor añada). Bond se quitó el disgusto del 53 dos películas después, en James Bond contra Goldfinger, cuando comparte una botella con la chica que asesinan a continuación. Y es que Dom Perignon fue el champagne del Bond interpretado por Sean Connery. Lo bebió en cinco ocasiones, con predilección por las añadas de los 50 y los 60. La única excepción fue Desde Rusia con amor, en la que bebió Taittinger. Pero, a partir de Vive y deja morir, con Roger Moore, Bond empieza a beber Bollinger. Inicialmente, su Cuvée más alta, el R.D. Y, a partir de GoldenEye, con Pierce Brosnan, el Grande Anne. Tradición que seguirá Daniel Craig: Bollinger también será un must para su 007.