Fotogramas

UN APRENDIZ CON TRUCO

Lin-Manuel Miranda es Jack, el as en la manga de este regreso de Mary Poppins. Hablamos con él.

- Por R. S.

¡Hagamos esta entrevista en

spanglish! Lin-Manuel Miranda (Nueva York, 1980) atiende a FOTOGRAMAS en un respiro del torbellino en el que se ha convertido su vida desde que, en 2015, pusiera Broadway patas arriba con el musical Hamilton,

un fenómeno social del que ha sido compositor, libretista y protagonis­ta. El espectador español quizá aún no lo sitúe, pero ya con un Pulitzer, tres Tony, tres Grammy, un Emmy, dos Olivier y una nominación al Oscar, Miranda es el gran truco que

Mary Poppins saca de su maletín. Cuando Rob (Marshall) y su pareja, el productor John DeLuca, me propusiero­n participar, les dije: Vale, pero ¿quién será Mary Poppins? Cuando me enteré de que sería Emily, no necesité saber nada más. Por no saber, no sabía que las canciones serían de Marc Shaiman y Scott Wittman. Soy fanático desde crío: desde que Marc escribía los monólogos musicales de Billy Crystal en los Oscar, apunta antes de confesar por qué él no firma ninguna canción: ¡Tardé siete años en componer Hamilton! Si querían estrenar a tiempo, hicieron bien pasando de mí.

Él es Jack, un aprendiz de Bert, el rol que interpretó Dick Van Dyke. Lo que es decir poco, porque Bert tenía como 50 trabajos, bromea. Miranda apunta el mayor desafío: Bailar. Yo te bailo salsa y merengue como un pro. Y en Hamilton hay truco: todo el reparto baila y lo da todo mientras yo rapeo y estoy medio parado en mitad del escenario. Esto ha sido otra cosa, asegura. Miranda pone una condición para estar en una tercera entrega que, más que

Mary Poppins Forever como mandaría la tradición Batman, debería llamarse Mary Poppins: Tokyo Drift, bromea: Que Emily siga. Si ella continúa, yo también quiero estar en una nueva película sobre Mary Poppins.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain