La escuela de la vida
★★★ ★★ L’École Buissonnière (Francia, 2017, 116 min.). Dir.: Nicolas Varnier. Int.: François Cluzet, Jean Scandel, François Berléand, Eric Elmosnino, Valérie Karsenti, Thomas Durand. DRAMA.
Pudiera ser que los árboles de cierta inquina hacia un nostálgico y camp cine francés dominado por los buenos sentimientos y la alegría de vivir no nos dejaran ver el bosque de una añorada tradición del film infantil de iniciación. Aunque no engañoso,
La escuela de la vida le quita al original en francés (que sería algo así como
La escuela de hacer novillos) un elemento lúdico, de tierna rebeldía hacia lo establecido, hacia el pupitre y lo académico.
Es precisamente la aventura diaria en la naturaleza que corre el pequeño Paul de la mano del dionisíaco Totoche (un
François Cluzet émulo pícaro y
Frente Popular de
Michel Simon) la que nos devuelve a eso que hoy se tilda de anticuado, quizás ya incapaz de conectar (aunque me niego a creerlo) con los niños actuales: la literatura de Mark Twain. Por muy francesa que sea la película, que lo es, nadie que no haya vivido en la lectura y se haya identificado con las peripecias de Tom Sawyer podrá decir que esto no le resulta familiar. Lecciones de vida, sano espíritu libertario (la reivindicación de la cultura zíngara) e incluso una subtrama de secretos familiares digna de las novelitas infantiles decimonónicas de Frances Hodgson Burnett. Más información en pág. 92 ESTRENO: 15 FEBRERO
PARA DISPUESTOS A HACER PELLAS DEL CÍNICO CINE INFANTIL ACTUAL. Lo mejor: la manera en la que Totoche convierte el bosque en un lugar mágico para Paul.
Lo peor: la precipitada conclusión melodramática de los acontecimientos.