COLOSA EN ARMAS
Faye Dunaway
Que Gucci la eligiera a los 77 años (hace tres) su musa no es casual ni tampoco que se vendieran millones de boinas tras inmortalizarlas con su corte bob la Bonnie Parker que robaba bancos junto a Warren Beatty en Bonnie and Clyde (A. Penn, 1967). Pura inspiración parisina y reflejo del espíritu más chic del cine gracias a vestuarios sublimes que encumbraron a ese gigantesco grano en el culo en palabras de Roman Polanski que la dirigió en Chinatown (1974). Y es que la excéntrica y hostil Miss Faye se ganó a pulso el título de actriz imposible, con la misma contundencia que el Oscar por su interpretación en Network, un mundo implacable (S. Lumet, 1976) o la fundada fama de femme fatale que la trajo en 1996 hasta España, para dejar caer a un inexperto Juan Diego Botto
En brazos de la mujer madura.