HONG SANG-SOO HABLA, BEBE Y AMA
Pocos realizadores en el mundo hay tan reconocibles como el surcoreano, autor de una prolija y muy personal obra, de la que ‘La mujer que escapó’, premiada en Berlín y San Sebastián, es el penúltimo ejemplo.
¿Quién es? O entras en su mundo o no, así de simple. El cine de Hong Sang-soo (Seúl, Corea del Sur, 1961) es repetitivo y monotemático, indudablemente, pero esconde algo que lo hace adictivo, bien sean sus historias de amor en espacios o tiempos diferentes, el encanto de sus personajes siempre dubitativos o esos diálogos que dicen verdades a la cara entre sorbo y sorbo de soju, vino blanco o cerveza coreana, esta última cada vez mejor, como asegura varias veces la actriz Young-hee (Kim Min-hee) en En la playa sola de noche (2017). Min-hee también protagoniza La mujer que escapó, en la que encarna a una joven que se reúne con tres amigas, por separado, en sus casas a las afueras de Seúl. El último encuentro es en una sala de cine.
¿De qué habla? Del amor, de la soledad y del séptimo arte, casi por este orden, y casi siempre desde el punto de vista femenino. Las heroínas de Sang-soo viajan solas, beben, fuman y pasean mientras disfrutan de una buena conversación entre amigas. ¿Los temas? Novios, sexo, comida, películas y, también, lealtad porque los hombres coreanos no son precisamente los más sinceros, como se recuerda en En otro país (2012).
¿Por dónde empiezo? Seguir la carrera del realizador y guionista no es tarea fácil porque ha rodado, a veces, más de una película al año desde 1996, pero La puerta de la vuelta (2002) puede ser un buen comienzo. En esta comedia romántica ya aparecen los besos robados, las conversaciones al lado del agua y las lentas comidas entre amigos o familia que tanto juego dan en su cine. Por supuesto, también ganó un premio internacional, esta vez en el Festival de arte de Brisbane (Australia) por la sutileza de sus caracterizaciones y por la frescura de su estilo narrativo.
¿Por qué es tan reconocible? Además de los temas, su apariencia es siempre la misma, en blanco y negro
– The Day He Arrives (2011) o
El hotel a orillas del río (2018), por ejemplo– o color. Largos planos secuencia con la cámara quieta solo perturbada por algún brusco zoom sobre un actor u objeto, diálogos improvisados de los intérpretes
–el director solo les entrega unas líneas antes de empezar– y solo uno, dos o tres personajes en el plano. En las últimas películas casi siempre aparece su pareja Kim Min-hee ( La doncella, de Park Chan-wook), a la que conoció en
Ahora sí, antes no (2015). Kwon Hae-hyo también es uno de sus actores fijos. Como él mismo ha dicho: Soy vago y no tengo imaginación, por eso siempre hablo de lo mismo.
¿Alguna secuencia para recordar? Quizás su cine no es de grandes momentos, pero nos quedamos, entre todos, con Kim Min-hee recostada en la helada arena soñando con una vida que se le ha escapado en En la playa sola de noche.
¿Qué es lo próximo? Estrenó Introduction en Berlín, su vuelta al blanco y negro que todavía no hemos visto en España, y este mes regresa a Cannes con In Front of Your Face, su undécima participación en el festival francés.
ESTRENO: 16 JULIO Domangchin yeoja (Corea del Sur, 2020, 77 min.). COMEDIA DRAMÁTICA.