Agnieszka Holland, por Charlatán.
La cineasta Agnieszka Holland se acerca a la figura real del curandero checo Jan Mikolášek en un drama en el que vuelve a viajar a la Europa de la mitad del siglo XX para contar una historia compleja y reveladora.
DE QUÉ VA: Dotado de un don excepcional para descubrir las propiedades medicinales de las plantas, Jan Mikolášek despierta por igual fascinación, temor y envidia.
La Troya del siglo XX. Para mí los hechos que sucedieron en Europa, especialmente en la zona central, alrededor de la segunda mitad del siglo XX tienen la misma importancia, a nivel simbólico y como forjadores de una identidad propia, que la guerra de Troya para los griegos, cuenta Agnieszka Holland (Varsovia, Polonia, 1948) cuando explica su regreso a un tiempo y lugar en los que ya situó dos de sus trabajos más reconocidos, Europa, Europa (1990) e In Darkness (2011). En ese mismo escenario discurre su último trabajo, Charlatán, un film presentado en la Berlinale de 2020 y que también se pudo ver en el pasado Festival de Sevilla, en el que la cineasta polaca nos acerca a la vida del curandero checo Jan Mikolášek, una figura que creíamos desconocida y olvidada pero que pronto vimos que tuvo un gran impacto y trascendencia en la sociedad checa de antes, durante y después de la Segunda Guerra Mundial, pero que sigue siendo vigente hoy en día porque conecta directamente con nuestra sociedad y temas como las noticias falsas o la cultura de la cancelación.
Entre el don y el infortunio. Discípula de Andrzej Wajda y colaboradora de Krzysztof Kieslowski, Holland regresa con este film a la República Checa, país en el que estudió cine en los años 60
–un período clave en el que decidí optar por la dirección en lugar del activismo político–, para narrar la historia de un personaje que, en manos de Ivan Trojan, es complejo y contradictorio, como los tiempos que vive, explica. No me interesan los biopics al uso, prefiero que los espectadores saquen sus propias conclusiones. Y aquí me interesaba mostrar a alguien que lucha contra sí mismo. Mikolášek: Puede curar, es su pasión y su razón de vivir, pero no soporta a la gente. Vive una historia de amor prohibida que lo libera pero a la vez lo tortura. Y, además, es utilizado por el sistema cuando él creía que estaba más allá de la política.
ESTRENO: 13 AGOSTO Šarlatán (República Checa, Irlanda, Eslovaquia, Polonia, 2020, 118 min.). DRAMA.